La caja de acero de 39 mm del TAG Heuer Carrera Skipper es funcionalmente idéntica al resto de la familia «Glassbox». Las asas afiladas y biseladas hacia adentro, los pulsadores de tipo pistón y la carrura cepillada son todos elementos familiares, aunque el elemento más destacado es, evidentemente, su zafiro en forma de caja y la ausencia de bisel.

Como resulta evidente, el elemento visual más destacado del TAG Heuer Carrera Skipper es su esfera. La rica paleta de colores fielmente vintage capta inmediatamente nuestra atención gracias a su atrevida combinación, con un fondo azul océano con cepillado radial sobre el que se disponen los dos tonos de verde y y el naranja intenso en las subesferas, índices y manecilla. A priori, los azules y verdes son una combinación cromáticamente difícil de encajar, aunque gracias al equilibrio que le aporta el naranja resulta atractiva.

Pero más allá de los colores, las novedades que implementa el Carrera Skipper son más que significativas. Por ejemplo, utiliza una variante de movimiento que calibra la subesfera de minutos del cronógrafo dispuesto a las 3 horas en 15 minutos en lugar de los habituales 30′ del Carrera. Gracias a ello, esta referencia se dispone en línea con los modelos Skipper originales de los años 60 y 70. El pequeño segundero queda disimulado a las seis horas debido a su minimalismo, con una escala serigrafiada directamente sobre la esfera y parcialmente tapado por la ventana de fecha. Es por ello que, a primera vista, aparenta ser un bicompax.

Si el modelo original de los años 60 que pretende reinterpretar simplemente muestra la palabra «Skipper» a las 12 en punto, en el nuevo modelo lo desplaza al totalizador a las 9 horas para mantener en su lugar el «Carrera» y reafirmar así el reconocimiento de la colección. Sin embargo, el cambio funcional más destacado lo encontramos en el anillo perimetral de doble pendiente. Sin la necesidad de mostrar una escala taquimétrica como el resto de referencias «Glassbox», el Carrera Skipper implementa en la parte exterior la escala de segundos, dejando la pendiente interior con un espacio abierto entre los índices facetados aplicados, lo que le da al Carrera Skipper una sensación de mayor amplitud y nitidez.

El calibre automático TH20-06 se ha modificado para que registre 15 segundos por vuelta de su totalizador de minutos, aunque fuera de este cambio ofrece la misma arquitectura y rendimiento que el buque insignia de la marca, el TH20-00, con embrague vertical y rueda de pilares, una gran reserva de marcha de 80 horas y una frecuencia de 28.800 alternancias por hora (4 Hz). Implementa amplios puentes esqueletados decorados con Côtes de Genève debajo de un rotor con la forma del escudo de TAG Heuer.

TAG Heuer entrega el Carrera Skipper con una robusta correa de tela azul marino intenso. Su precio de precio de venta es de 6.850 €.

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Cada uno de los nuevos modelos TAG Heuer Monaco Chronograph recurren a una caja de 39 mm de ancho y 14,70 mm de grosor fabricada en titanio mate gracias al pulido final con chorro de arena. Este acabado le agrega un toque arquitectónico futurista a su familiar silueta cuadrada, resaltando las suaves curvas que fluyen a lo largo de los bordes laterales de la caja y así evitar la simpleza del diseño angular. Gracias a sus cortas asas en forma de cuña, resulta un reloj cómodo incluso para muñecas pequeñas.

La única novedad la encontramos en la combinación de colores «Turquesa», que reviste la caja de una capa de DLC negro, una adición que acentúa su look deportivo y le confiere un punto de agresividad. Las tres variantes del Monaco esqueletado están rematadas con fondos con cristal de zafiro y ofrecen una hermeticidad de 10 bar (100 metros).

El diseño de la esfera de la línea TAG Heuer Monaco Skeleton (llamémosla así, aunque la firma no la cita con este adjetivo en su web) está cuidadosamente diseñado y equilibrado, respetando la estética geométrica que define al Monaco, y además ofrece una buena legibilidad y un impacto visual considerable. Mantiene la familiar escala de minutos circular, pero son los luminiscentes índices horarios los que realmente reclaman nuestra atención, ya que son los que sostienen la estructura esqueletada de la esfera al extenderse desde el realce cuadrado perimetral hasta casi el centro de la esfera.

Cada uno de estos índices (excluyendo las posiciones cardinales, en las que no están presentes) converge para acoger un elemento de la esfera: los índices del lado izquierdo y derecho se estrechan uno hacia el otro insinuando una X para sostener las subesferas del cronógrafo, mientras que los índices a las 11 en punto y a la 1 en punto se fusionan para formar una forma trapezoidal que sostiene el emblema TAG Heuer aplicado. Por último, el casi invisible pequeño segundero a las 6 en punto se dispone en la unión de los índices en las 5 y las 7 en punto.

Además, las subesferas del cronógrafo son completamente sólidas, lo que hace que sus indicaciones sean fáciles de leer con un simple vistazo y ofrecen un amplio lienzo para difundir el color. Hablando de color, TAG Heuer diferencia cada uno de los tres modelos de esta colección con una combinación de colores de esfera. Como sugiere el nombre, el modelo «Original Blue» recurre a un rico azul cobalto mate en los puentes esquelados y las subesferas, combinado con un llamativo rojo anaranjado para las manecillas del cronógrafo y varias marcas en el cronometraje y escalas de cronógrafo. Este diseño incluso conserva parte del estilo de esfera de panda blanco sobre azul del Mónaco clásico, con las subesferas del cronógrafo luciendo anillos biselados de nítido color blanco. A pesar de la intrincada red de componentes de movimiento expuestos en el centro de la esfera, el «Original Blue» aún conserva la sensación esencial de Mónaco.

Por el contrario, el «Racing Red» es un menos distintiva. Con negro mate para los puentes, detalles en rojo anaranjado y los marcos con escalas de las subesferas en plata, adquiere una apariencia más genérica como cronógrafo de carreras. Por contra, su monocromatismo hace que nuestra atención recaiga tanto en la estructura esqueletada como en la rueda de fecha con su ventanilla iluminada a las 6 h.

Por último, el modelo «Turquoise» revestido en DLC negro es la expresión más salvaje y vanguardista, sumándole además un brillante tono espuma de mar a los índices horarios y los marcos de las subesferas, y complementándose con el rojo intenso de la trotadora central y las pequeñas manecillas de los dos subdiales sobre un fondo negro mate.

TAG Heuer implementa en su interior el calibre cronógrafo automático Heuer 02, el movimiento insignia de facto de la marca en los últimos años. Este cronógrafo integrado con rueda de pilares y embrague vertical ofrece una gran reserva de marcha de 80 horas mientras late a un frecuencia de 4 Hz (28.800 alternancias por hora).

Visualmente, estos movimientos son más o menos idénticos a lo que hemos visto en otros relojes con el calibre Heuer 02, con rotores calados inspirados en volantes de carreras oscurecidos y amplios puentes esqueletizados, ambos rematados con Côtes de Genève. Sin embargo, cada modelo agrega toques de color a juego con la esfera en el texto del rotor y la rueda de pilares, con azul celeste profundo para el «Original Blue», escarlata brillante para el «Racing Red» y, por supuesto, turquesa para la variante «Turquoise». 

Al igual que los recientes Monza Flyback y Carrera “Glassbox”, el Monaco Chronograph Skeleton continúa con el giro de TAG Heuer hacia diseños más contemporáneos. Frederic Arnault, el CEO de la firma,  ha indicado que es el camino a seguir, ya que permite que la marca deje de depender de los relojes deportivos de estilo vintage que son muy comunes en este segmento de precios. El precio de las dos versiones del TAG Heuer Monaco Chronograph Skeleton en titanio mate es de 10.859 €, mientras que la referencia con acabado en DLC sube hasta los 11.400 €.

El nuevo Monaco se las arregla para parecerse mucho a un Monaco sin dejar de ser muy diferente. A pesar de las características aparentemente opuestas, en conjunto todo encaja… con la única salvedad del precio, ya que es un tercio más caro que un Mónaco con esfera convencional y el mismo movimiento y caja. Me parece demasiado para una esfera calada, aunque sin duda haya requerido una reelaboración sustancial del movimiento.

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A pesar que en este 60º aniversario del Carrera las nuevas referencias ofrecen mayoritariamente un look más vintage, el Carrera Chronograph 44mm tiene que ver con la imagen más vanguardista de este icono nacido en 1963. Cuenta con algunos elementos clásicos del Carrera, como las asas facetadas y el diseño general de su caja y esfera, pero es un reloj decididamente contemporáneo con una caja de gran tamaño, líneas más contundentes y materiales avanzados como la cerámica.

La caja sigue siendo idéntica, con el clásico estilo del Carrera. Con 44 mm de diámetro y 15 mm de altura, esta es la versión más deportiva de la colección estándar. El cambio más importante es que ya implementa un bisel de cerámica en color verde, con superficies cepilladas en el centro, acabado pulido en el borde y escala taquimétrica grabada en blanco. Además, el verde oliva da paso a un verde más frio que personalmente me parece más atractivo. Sumergible hasta 100 m, la caja presenta cristal de zafiro en ambos lados.

Otra pequeña actualización es que se han eliminado las inscripciones «Heuer 02» y «80 horas» a las 6 en punto, lo que da como resultado una esfera más limpia. Prosigue con su diseño tricompax, con la ventana de fecha «pisando» el pequeño segundero a las 6 en punto, y una esfera que presenta una textura cepillada circular.

Como bien avanza su nombre completo, el TAG Heuer Carrera Chronograph 44mm Calibre Heuer 02 Automatic alberga el movimiento cronógrafo automático manufactura Heuer 02. Este calibre integrado dispone de rueda de pilares y embrague vertical, una combinación que garantiza el funcionamiento suave y preciso del cronógrafo. Latiendo a una suave frecuencia de 28.800 alternancias por hora (4 Hz), dispone de una excelente reserva de marcha de 80 horas.

Finalmente, mientras que este nuevo Carrera Chronograph 44mm Green se puede pedir con el tradicional brazalete de acero de 3 eslabones, TAG Heuer también le suma la opción de una correa de caucho de nuevo diseño, con un aspecto que imita el de un brazalete con eslabones, con un cierre desplegable con microajuste como el Aquaracer .

Las nuevas ediciones verdes del TAG Heuer Carrera Chronograph 44mm tienen un precio de 6.200 €  con correa de caucho y 6.400 € con brazalete de acero.

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Aquaracer Professional 200 Bitono

La última generación del  Aquaracer casi siempre se ha fabricado en acero (o titanio) para mantener su estética y espíritu de reloj-herramientas. Ahora, en dos versiones de oro y bitonal acero/oro, TAG Heuer demuestra su intención de elevar su nicho de mercado para abarcar aquellos que buscan el lujo y la ostentosidad de los metales preciosos. Acertadamente, se ha elegido los más ergonómicos y modernos 40 mm del Aquaracer Professional 200 en lugar de los 43 mm del más puro reloj de buceo de la firma, el Aquaracer Professional 300.

Los nuevos Aquaracer 200 de dos tonos se ofrecen en dos tamaños muy diferenciados. La primera referencia mantiene la habitual caja de 40 mm de diámetro, mientras que la segunda versión, con sólo 30 mm e índices horarios con diamantes, está claramente destinada al público femenino. Ambas implementan un bisel con un inserto de oro amarillo (esfera azul) o rosa (esfera negra) y una corona del mismo metal. Sin embargo, las manecillas, los marcadores y los índices están chapados con los respectivos metales preciosos. Esto puede parecer una escapatoria, pero por la cantidad de material necesaria y el coste de acabado en unos elementos que no se desgastan, es una solución más que satisfactoria para mantener lo más bajo posible el precio final.

El Aquaracer Professional 200 de dos tonos más grande presenta una familiar esfera alistonada, esta vez rematada con un acabado fumé con un sutil rayos de sol. Los relojes con detalles en oro amarillo cuentan con una esfera azul degradada que se desvanece para combinar con la correa de caucho azul oscuro, mientras que las opciones de oro rosa recibien un degradado de gris humo a negro y una correa de caucho negra. Ambas opciones combinan muy a la perfección con los respectivos colores de oro, logrando un look cálido y atractivo. 

Los Aquaracer de 30 mm siguen los mismos esquemas cromáticos de sus hermanos mayores, aunque optan por un acabado nacarado con once diamantes Top Wesselton (clasificación VS) dispuestos en los índices facetados. 

Se entregan con una correa de caucho flexible con un canal central texturizado y canales exteriores lisos. Las correas están equipadas con un cierre desplegable de acero que cuenta con una extensión de ajuste. Vale la pena señalar que los modelos de 40 mm incluyen un sistema de ajuste rápido, mientras que los modelos de 30 mm tienen orificios de cierre perforados estándar para realizar el microajuste. 

Aquaracer Professional 200 Gold

Si bien TAG Heuer presentó el año pasado su primer Aquaracer con un calibre manufactura latiendo en el Aquaracer Professional 1000, este año esos esfuerzos y trae un nuevo calibre a la serie Aquaracer 200 en el interior del nuevo y reluciente Aquaracer Professional 200 Full Gold.

Su geometría es idéntica a la de los modelos anteriores: caja de 40 mm con los ángulos de la carrura biselados y pulidos y superficies cepilladas. Los nuevos modelos de oro están disponibles en dos versiones de oro amarillo y oro rosa, con una corona en DLC negro, el mismo acabado de la trasera que incorpora un cristal de zafiro que permite ver el movimiento. Tal como ya informa su nombre, la hermeticidad es de 200 m. El bisel unidireccional dodecagonales a juego no implementa luminiscencia alguna ni una escala de buceo los primeros 15 minutos. Ello implica que estos relojes no contarán con la certificación ISO para relojes de buceo, aunque vale decir que pocos de los usuarios recurrirán a ellos como instrumento de precisión para controlar los tiempos de inmersión.

Ambos recurren a la clásica esfera del Aquaracer con ranuras horizontales, interrumpida solo por el logotipo (en dorados a juego) y el texto de la esfera. El modelo de oro amarillo presenta una esfera azul degradada que se oscurece hasta casi volverse negra en el borde de la esfera, mientras que el modelo de oro rosa luce un gradiente de gris a negro. Ambos cuentan con manecillas luminiscentes de tipo espada e índices horarios hora trapezoidales biselados  y aplicados que también cuentan con aplicación de sustancia luminiscente. Las manecillas y los índices están chapados en oro para que coincidan con sus respectivas cajas. A las seis en punto encontramos la ventana de fecha (sin enmarcar).

Los Aquaracer Professional 200 Gold se entregan con correas de caucho con cierre de titanio en DLC, con el mismo color de sus respectivas esferas degradadas, azul para la versión en oro amarillo o negra para la de oro rosa. Desafortunadamente no implementan el cierre de extensión de los modelos Professional 300.

A través del zafiro que implementa la trasera podemos ver lo que podría decirse que es la principal atracción (no te dejes engañar por el cálido brillo de las cajas de oro): el calibre in-house TH31-00. En 2021, presentó el calibre TH30, fabricado para TAG por Kenissi. Con cada vez más firmas recurriendo a calibres fabricados por Kenissi, muchas de ellas usando lo que parecían ser una versión ligeramente modificada de los movimientos de Tudor, uno tenía que comenzar a preguntarse hasta qué punto los movimientos eran realmente calibres in-house o si era hora de comenzar a llamar simplemente a Kenissi un proveedor de movimientos y etiquetar sus mecanismos como tales.

Pero estoy divagando, porque para el TH31-00, TAG Heuer se ha asociado con el fabricante suizo de movimientos de alta gama AMT, que es el brazo de Sellita que ofrece diseño y fabricación de movimientos parcialmente a medida y ha producido mecanismos para Carl F. Bucherer y Hanhart. El TH31-00 cuenta con una impresionante reserva de marcha de 80 horas y dispone del certificado COSC. Si bien AMT aún es un fabricante relativamente nuevo, el historial de Sellita no ofrece dudas. Por ello, TAG Heuer ha otorgado garantías de cinco años a este calibre, lo que demuestra la confianza que ha depositado la firma en ellos.

No es raro que las marcas implementen nueva tecnología en modelos de producción limitada o más caros, y esta vez no es una excepción. Al igual que con el Aquaracer 1000, TAG Heuer no quería presentar silenciosamente su último calibre in-house, por lo que ha optado por implementarlo en dos lujosos relojes de oro macizo. Sin embargo, hay una imagen aún más grande aquí. Al presentar un nuevo calibre in-house y hacerlo en su reloj de buceo más comedido, la marca nos indica sus intenciones. En primer lugar, prosigue con su cambio de ETA/Sellita hacia calibres propios e in-house, y en segundo lugar, vemos cómo se suma a la tendencia del mercado de apostar por relojes de un tamaño más ergonómico. Los TAG Heuer Aquaracer Professional 200 Full Gold formarán parte de la colección estándar y no son de producción limitada.

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Aunque las cajas de acero de la colección Glassbox se reconocen instantáneamente como genuinamente Carrera, estos nuevos modelos ofrecen uno de los cambios visuales más drásticos de los últimos años. El Carrera Chronograph 39 mm es evidentemente mucho más pequeño que el Carrera Chronograph Tourbillon 42 mm, pero ambos ofrecen un estilo similar. Como su nombre nos avanza, el cristal es el elemento central de este nuevo diseño: alto y muy abovedado, se extiende de borde a borde de la caja de manera que parece no haber ni bisel. No solo altera el tradicional estilo del Carrera, sino que agrega una inesperada ventaja adicional al permitir que la esfera se lea incluso desde ángulos casi imposibles.

TAG Heuer lo combina con una caja geométrica clásicamente Carrera, con características asas angulares biseladas, biselado pulido que se prolonga de la carrura a las asas, cepillado de la carrura y robustos pulsadores de tipo pistón. Con un cristal de zafiro en la trasera en ambos modelos, la hermeticidad del 39 mm y del tourbillon es de unos respetables 100 metros. 

Cada referencia de la colección “Glassbox” marca su propio territorio a través del diseño de su esfera. La variante con esfera azul del TAG Heuer Carrera Chronograph de 39 mm, es la que ofrece la imagen más equilibrada y moderna. Al igual que varias iteraciones modernas de Carrera, prescinde de la típica textura de esfera con rayos de sol en favor de un cepillado radial de finamente granulado. Si, parece un cambio sutil, pero la realidad es que le confiere un acertado toque deportivo más contemporáneo.

Dado que el cristal es la pieza central, no es de extrañar que TAG Heuer haya rediseñado radicalmente el perímetro de la esfera y las escalas  que implementa para interactuar mejor con la nueva filosofía de diseño «Glassbox». La parte interior del realce acoge la escala de segundos del cronógrafo claramente impresa y presenta una espectacular concavidad que se extiende 90 grados desde la superficie plana de la esfera hasta el borde superior vertical de la escala. Desde ahí, la parte exterior se inclina hacia abajo, curvándose para encontrarse con el cristal en el lateral de la caja. Este diseño orgánico y redondeado puede estar muy alejado visualmente de los Carrera históricos, pero incluso este segmento exterior está ligado al lenguaje visual del Carrera con la adición de una nítida escala taquimétrica.

El resto de la esfera resulta más reconocible, incluidas las manecillas de tipo espada, las subesferas del cronógrafo con azurage y el minimalista pequeño segundero a las 6 en punto junto  la ventana de fecha, pero incluso estos elementos más tradicionales reciben pequeños ajustes para adaptarse mejor a este nuevo concepto.

Si el TAG Heuer Carrera Chronograph de 39 mm con esfera azul presenta una equilibrada mezcla entre pasado y futuro, el modelo de esfera negra representa un homenaje mucho más descarado a los Carreras anteriores. Si bien mantiene los conceptos básicos como los elementos de la esfera, la superficie de la esfera cepillada radialmente y el distintivo anillo perimetral, hay una serie de cambios que hacen que este modelo se acerque más a los diseños de Carrera de los años 60.

Lo más obvio es la combinación de colores «panda inverso», con las tres subesferas plateadas azurage en relieve que contrastan marcadamente con su entorno negro. También debemos tener en cuenta el tono caqui de la sustancia luminiscente, que le añade un toque de calidez vintage. Con todo ello, lo que subjetivamente más me ha sorprendido es la ubicación de la ventana de fecha a las 12 en punto.

La esfera más exclusiva de la colección «Glassbox» de TAG Heuer Carrera es el Chronograph Tourbillon de 42 mm. En lugar de la estética compactos y recargada de los modelos de 39 mm, TAG Heuer busca acentuar las dimensiones más amplias de esta pieza con un diseño más abierto y espacioso.

Sin una escala taquimétrica, la escala de los segundos se desplaza hacia el segmento exterior del anillo perimetral, lo que implica que la esfera dispone de mucho más espacio que los modelos de 39 mm. Sin embargo, este cambio crea una transición no muy  bien resuelta y poco elegante entre la esfera azul con cepillado radial y el neutro anillo perimetral metalizado.

Del mismo modo, las subesferas tono sobre tono con anillos exteriores plateados cepillada en relieve conducen a una apariencia más limpia y visualmente más abierta, mientras que los detalles en naranja brillante en el segundero central del cronógrafo y la escala exterior agregan un contraste irresistiblemente atrevido y deportivo.

Por supuesto, como la mayoría de los relojes equipados con tourbillon, el Carrera Chronograph Tourbillon de 42 mm sirve para enmarcar visualmente este escape. Un trío de brazos esqueletados cepillados radialmente forman la jaula del tourbillon, mientras que un anillo exterior biselado y pulido ayuda a focalizar la atención hacia las 6. Hasta ahí, perfecto, pero debemos tener en cuenta la forma en que la ventana del tourbillon corta el realce perimetral a las 6. Personalmente, me parece un desatino. 

Los dos Carrera Chronograph de 39 mm implementan el calibre TH20-00. TAG Heuer se refiere a él como una «versión evolucionada» de su anterior calibre cronógrafo insignia, el Heuer 02, y aunque la mayoría de las actualizaciones parecen tener como objetivo mejorar la eficiencia, cabe destacar que también mejora sus acabados. El Heuer 02 ha estado en producción durante menos de tres años, por lo que es bastante sorprendente ver una revisión significativa tan pronto, aunque algunas de sus nuevas características son bienvenidas, como por ejemplo su sistema bidireccional de remonte automático. Sigue disponiendo de embrague vertical y rueda de pilares, con una remarcable reserva de marcha de 80 horas y latiendo a 28.800 alternancias por hora. Visualmente, el TH20-00 simplifica el Heuer 02 mediante de puentes semiesqueletados más anchos y resistentes rematados con Côtes de Genève. Sin embargo, es en el rotor el elemento que recibe un cambio más radical, sustituyendo el rotor esqueletado del Heuer 02 inspirado en el volante de carreras de radios múltiples por un rotor recortado basado en el escudo de TAG Heuer, incluyendo una base mate con un centro elevado cepillado verticalmente para lograr mayor profundidad visual.

TAG Heuer implementa el calibre TH20-09 en el Carrera Chronograph Tourbillon de 42 mm. Así como el TH20-00 es un Heuer 02 actualizado, el TH20-09 evoluciones el Heuer 02T. A diferencia del TH20-00, el TH20-09 cuenta con la certificación cronométrica del COSC, disfrutando de la misma reserva de marcha de 80 horas y una frecuencia de 28.800 alternancias por hora. 

TAG Heuer entrega los tres modelos de la colección Carrera “Glassbox” con clásicas correas desplegables de piel de becerro, en color negro y perforada para la versión con esfera negra y en color azul y lisa para las dos referencias con dial azul. 

El nuevo TAG Heuer Carrera Chronograph 39 mm estará disponible a través de distribuidores autorizados a partir de abril de 2023 con un precio de 6.500 €, mientras que el TAG Heuer Carrera Chronograph Tourbillon 42 mm lo seguirá en mayo de 2023, y su precio será de 23.000 €.

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Carrera Glassbox

Poco os avanzamos de la que es la novedad más excitante de TAG Heuer en este Watches and Wonders 2023, ya que como os hemos avanzado, en breve podréis leer todas sus interioridades en un artículo individualizado.

Lo más destacado es que la firma retoma el estilo glassbox, un zafiro abovedado tipo «caja de cristal», que encontramos en los primeros modelos Carrera para crear una de las siluetas más llamativas que ha tenido la colección hasta la fecha.

La nueva colección «Glassbox» incluye dos modelos: el TAG Heuer Carrera Chronograph de 39 mm y el TAG Heuer Carrera Chronograph Tourbillon de 42 mm. Seguiremos con ellos en dos días.

Carrera Chronograph 42 mm

Dos de los lanzamientos más impactantes del Carrera Chronograph añaden  energía cromática al diseño más versátil de la firma gracias a una combinación única de vivos colores en contraste que los diferencia rápidamente del resto de la colección.

Las cajas de acero de 42 mm de diámetro son prácticamente idénticas a las versiones anteriores de Carrera Chronograph, con un estrecho bisel inclinado y pulido, las típicas asas facetadas hacia el interior y con anchos biseles pulidos en la carrura son elementos básicos de los Carrera, igual que los pulsadores de tipo pistón y el fondo de zafiro. 

Si el envoltorio no trae novedad alguna, no podemos decir lo mismo de las esferas. La base del dial sigue siendo clásicamente Carrera, con rayos de sol, índices facetados aplicados, manecillas de tipo bastón, anillos de las subesferas elevados y un limpio y minimalista pequeño segundero a las 6 en punto. La gran novedad es el agresivo y dinámico estilo que le confiere los abundantes detalles en diferentes tonos de naranja.

Para la trotadora central y las manecillas de los totalizadores cronográficos, TAG Heuer opta por un saturado y vibrante rojizo, mientras que para los numerales de la escala perimetral de segundos y los índices de cada 10 unidades del pequeño segundero adquiere un color más claro, un naranja asalmonado.

Sin embargo, es el diseño del anillo que incluye los índices horarios el elemento clave visualmente hablando: un aparente degradado que va, en sentido horario, desde un naranja muy amarillento hasta el mismo rojo de las manecillas. Las dos opciones de color de esfera desvían estos detalles naranjas hacia diferentes direcciones estilísticas. El modelo de esfera negra ofrece un aspecto más clásico, mientras que la esfera azul oscuro ofrece un homenaje interesante a uno de los modelos más interesantes en la prolífica historia del Carrera: el Heuer Carrera 1153N, más conocido como «Mick Jagger».

En su interior late el conocido calibre cronógrafo automático Heuer 02. Aunque TAG Heuer ha presentado una versión actualizada del Heuer 02 como parte de sus novedades en Watches and Wonders 2023, la firma parece estar avanzando con la primera generación. El Heuer 02 sigue siendo un mecanismo verdaderamente interesante, con una considerable reserva de marcha a una frecuencia de 4 Hz (28.800 alternancias por hora).

Estéticamente, estos dos modelos presentan el Heuer 02 de manera familiar, con puentes esqueletados con Côtes de Genève y un rotor dorado inspirado en las ruedas de un automóvil. TAG Heuer combina ambos modelos nuevos con correas desplegables de piel de becerro a juego con la esfera.

Carrera Date 36

TAG Heuer ha lanzado una nueva versión con fecha del Carrera en 36 mm en que el color es el auténtico protagonista. A pesar de su reducido diámetro, la idea de la firma es llegar a un público unisex. Los nuevos Carrera de 36 mm no solo atraen por sus llamativos colores, sino también por un estilo clásico que destaca entre la deportividad del resto de las referencia de la colección.

Además, la caja rediseñada reduce el grosor del Carrera Date en 2 mm, situándose en unos ergonómicos 10 mm. Del mismo modo se ha reducido la distancia de asa a asa y ahora implementa un brazalete más cónico, traduciéndose en un perfil más esbelto.

En el interior, el Calibre 7 representa una actualización del Calibre 5 de última generación, ampliando la reserva de marcha en 18 horas, llegando ahora a unas respetables 56 horas. Además, reubica la ventana de fecha a las 6 en punto, una acertada decisión que se traduce en una mayor armonía y simetría. Aunque muchos preferirían una rueda de fecha del mismo color, no nos quejamos de la ventana del marco, un detalle que demasiadas marcas excluyen. Los fanáticos de los fondos de exhibición están de suerte, ya que el rotor fresado de la marca es completamente visible en el reverso del reloj.

Lo más notable, por supuesto, son los colores poco convencionales de la esfera. de esfera poco convencionales. En el momento del lanzamiento, se espera que estén disponibles las versiones en plateado, azul y verde, mientras que el impactante rosa llegará un mes después, en mayo. ¿Por qué esta demora? Crear expectación y demanda. Es la única versión que cuenta con índices horarios y manecillas plateadas y una esfera decorada con un precioso rayos de sol en vórtice.

Las restantes tres referencias son chapadas en oro rosa, una elección extraña dada sus cajas en acero, y unos rayos de sol convencionales. Independientemente de su idoneidad cromática, los elementos de la esfera en oro rosa se ven verdaderamente nítidos, particularmente en las versiones azul profundo y verde pastel pálido.

Cabe destacar la sorprendente elección del color gris para la segundera central en la esfera plateada, un tono que no coincide ni con la caja, la esfera, los índices ni con ninguna de las otras manecillas.

Carrera Plasma Diamant d’Avant-Garde

TAG Heuer sigue mostrando su tecnología de diamantes cultivados en laboratorio con dos modelos poco convencionales. Mientras que la estrella del espectáculo es el TAG Heuer Carrera Plasma Diamant d’Avant-Garde Chronograph Tourbillon 44mm, que presenta su esfera, bisel, caja y brazalete engastados asimétricamente con 124 diamantes transparentes (incluida una corona de un diamante rosa de 1,3 quilates), el segundo modelo Diamant d’Avant-Garde estrena una tecnología diferente de crecimiento de diamantes, y representa el primer modelo de la marca que implementa diamantes cultivados en laboratorio de colores.

Sobre la base de la versión del nuevo Carrera Date 36 mm que os acabamos de presentar, el TAG Heuer Carrera Plasma Diamant d’Avant-Garde 36 mm presenta una caja de oro blanco combinada con una combinación de diamantes cultivados en laboratorio blancos yo rosados.

A diferencia de los modelos Carrera Date estándar de 36 mm, la renovación del nuevo TAG Heuer Carrera Plasma Diamant d’Avant-Garde de 36 mm presenta un motivo ranurado concéntrico, en lugar de una pista de minutos impresa. Además de jugar con su estética elegante y moderna, el diseño del realce ayuda a mantener el enfoque en la esfera del reloj. Si bien el diseño de la esfera es el mismo que podemos encontrar en el Carrera Date 36 mm con índices en forma de bastón (doble a las 12 en punto) y una ventana de fecha a las 6 en punto, la esfera es todo menos ordinaria.

Con un total de 2,9 quilates, la superficie de la esfera en sí es una brillante placa de diamantes policristalinos complementada con 12 diamantes blancos talla baguette que sirven como índices horarios. Además, debajo del índice a 12 en punto, justo debajo del nombre «Carrera», hay un gran diamante rosa con la forma del logotipo de TAG Heuer.

Del mismo modo, mientras que la forma de las tres manecillas montadas en el centro se ha heredado de los modelos estándar de Carrera Date de 36 mm, las manecillas de horas y minutos están esqueletadas en lugar de estar rellenas con material luminiscente con el fin de obstruir lo mínimo posible la visión de los diamantes subyacentes.

Cuando está completamente desprovisto de irregularidades e impurezas, un diamante será transparente y completamente incoloro. Por lo tanto, para crear los diamantes rosas cultivados en laboratorio se utiliza un método de deposición química de vapor (CVD) para introducir pequeñas irregularidades durante el proceso de crecimiento. Esto permite que los diamantes se coloreen de manera homogénea en todo el proceso sin necesidad de ningún procesamiento posterior.

En cuanto a su mecánica no hay diferencia alguna respecto a los Carrera Date estándar de 36 mm, es decir, late al ritmo del Calibre 7 que podemos observar desde el zafiro que cierra la trasera. Su reserva de marcha es de 56 horas y su frecuencia de vibración es de 4 Hz. 

Si bien el nuevo TAG Heuer Carrera Plasma Diamant d’Avant-Garde de 36 mm que se presentó este año en Watches & Wonders 2023 es solo un prototipo, este modelo finalmente se producirá en cantidades limitadas y eventualmente estará disponible para la venta en el finales de 2023.

Carrera Plasma Diamant d’Avant-Garde Chronograph Tourbillon

Tal como vimos el año pasado con el primer Carrera Plasma, la caja es el fascinante centro de atención. Construida completamente de aluminio anodizado, la caja del nuevo Carrera Plasma está pulida con chorro de arena con recubrimiento DLC negro  e incluye 48 diamantes cultivados en laboratorio.

La primera versión tenía un bisel de cerámica sin diamantes, pero esta vez presenta 26, mientras que el nuevo brazalete de aluminio a juego completa esta «diamantización» sumándole 34 más. Con todo este despliegue, el efecto visual es excepcionalmente moderno, una versión vanguardista de los relojes más ostentosos que da la impresión de ser fragmentos que fluyen saliendo de la esfera centelleante. Sin embargo, la corona de diamantes de 2,5 quilates destaca sobremanera. 

El dial es idéntico al modelo del año pasado, con los diamantes sumando 4,9 quilates, divididos entre los 12 índices horarios aplicados y las tres placas policristalinas utilizadas para la esfera propiamente dicha, que presenta una tonalidad más clara respecto a los dos totalizadores cronográficos de 30 minutos y 12 horas. Estas placas se crean al hacer crecer una gran cantidad de cristales de diamante como uno solo. Las manecillas de horas y minutos lacadas en negro mate (para mejorar la legibilidad) cuentan con aplicación de Super-LumiNova, mientras que el segundero central del cronógrafo está chapado en rodio. A las 6 en punto, por supuesto, encontramos el tourbillon en lugar del tradicional pequeño segundero.

Menos resplandeciente pero más intrigante desde el punto de vista relojero es el Calibre Heuer 02T Nanograph visible a través del fondo de zafiro. Este movimiento se anunció en 2015 y se lanzó oficialmente en 2016. Construido sobre la base del (breve) movimiento CH80, el Heuer 02T fue uno de los primeros movimientos de Jean-Claude Biver durante su mandato como director de TAG Heuer. En 2019, el movimiento se actualizó para incluir una espiral Nanograph de nanotubos de carbono, más fácil de producir en masa que las de silicio y más resistente a los golpes debido a su elasticidad nativa.

Además del rotor con el logo de TAG Heuer y los puentes en bandera a cuadros, la jaula del tourbillon está hecha de titanio para la sección central y fibra de carbono para la parte superior, todo en un esfuerzo por mantener el peso al mínimo, lo que a su vez ayuda a aumentar la reserva de marcha y el rendimiento cronométrico. Hablando de eso, el movimiento funciona a 28.800 alternancias por hora con una reserva de marcha de 65 horas y dispone del certificado COSC.

Mirando este nuevo modelo nos damos cuenta que la primera versión 2022 realmente parece un esbozo inacabado. Ahora, el Carrera Plasma finalmente se siente completo, con un bisel y un brazalete adecuado que permite que el diseño adquiera todo su esplendor. Esperemos que la próxima iteración implementa también diamantes en los pulsadores cronográficos. Como era de esperar, la producción será limitada, aunque todavía no disponemos de cuántas unidades serán. 

La entrada TAG Heuer en Watches and Wonders 2023; todo al Carrera se publicó primero en Watch Test.

Aunque la caja de acero con revestimiento DLC negro de 44 mm de diámetro es algo grande para un cronógrafo moderno, también es un claro ejemplo de como un look negro ayuda a disminuir visualmente el tamaño. A nivel general, mantiene las líneas que el Carrera de producción estándar, con las características asas angulares biseladas y las superficies planas. El Carrera ya tiene un aspecto compacto para un reloj de 44 mm gracias a sus cortas asas inclinadas, pero el uso de DLC negro lo compacta visualmente aún más, al tiempo que también proporciona una buena base para la combinación de pulido y cepillado lineal, creando un atractivo juego de luces.

TAG Heuer aprovecha este lienzo negro para crear una serie de puntos focales con el uso de varios detalles en naranja brillante que destacan sobremanera gracias al fuerte contraste. El texto «Porsche» grabado en el bisel de cerámica con escala taquimétrica es la única referencia visible de Porsche en el anverso del reloj. Al igual que el cuerpo de la caja, dicho bisel cerámico implementa una combinación de superficies pulidas, cepilladas radialmente, grabadas y pintadas para resaltar su geometría dinámica. En la parte posterior luce un fondo con cristal de zafiro y ofrece una más que correcta hermeticidad de 100 metros. La corona también implementa el naranja con un delgado anillo en su zona media.

Del mismo modo que la caja, la esfera del TAG Heuer Carrera Chronograph x Porsche Orange Racing es una vibrante versiónquie incluye los elementos habituales que encontramos en el Carrera gracias al uso de color y acabados. El naranja lo encontramos en los anillos que encierran la esfera principal y cada una de las tres subesferas, en la escala y manecilla de los totalizadores de 30 minutos y de 12 horas (a las 3 y 6 horas respectivamente), y en la manecilla de segundos de cronógrafo central. Además incluye una escala de minutos con grandes numerales arábigos aplicados cada cinco minutos y una discretísima ventana de fecha implementada dentro del pequeño segundero sobre las 6 horas.

Esta provocativa estética puede que no sea del agrado general, pero es innegable que llama la atención y le confiere personalidad. A ello también ayuda los acabados cepillado vertical de la esfera principal, el azurage de los dos totalizadores cronográficos y el acabado de tipo grano de asfalto, limitado esta vez al anillo perimetral del pequeño segundero.

Para el Carrera Chronograph x Porsche Orange Racing, TAG Heuer vuelve a recurrir al cronógrafo automático Heuer 02, el movimiento insignia de la marca desde su presentación en 2018 gracias a su gran reserva de marcha de 80 horas con una frecuencia de 28.800 alternancias por hora (4 hZ), junto con una rueda de pilares y la activación del cronógrafo mediante embrague vertical. El acabado de este calibre está más o menos en línea con las otras iteraciones del Heuer 02, es decir, con Côtes de Genève en los puentes calados, un rotor esqueletado y ennegrecido inspirado en un volante  y una contrastante rueda de pilares en naranja que vincula el mecanismo con el código cromático del conjunto.

Con una correa textil negra de doble pespunte y forro naranja, el TAG Heuer Carrera Chronograph x Porsche Orange Racing ya está disponible a través de distribuidores autorizados seleccionados, boutiques TAG Heuer y la web de la firma bajo un precio de 6.850 €.

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El diseño general de la nueva versión de titanio del TAG Heuer Aquaracer Professional 200 Solargraph (ref. WBP1180.BF0000) resulta inmediatamente familiar e identificable con otros modelos de la actual colección Aquaracer. La caja mantiene los 40 mm, la corona atornillada a las 3 en punto, un cristal de zafiro plano y una trasera ciega atornillada. Y sobretodo, el bisel dodecagonal de giro unidireccional, esta vez fabricado en el mismo titanio que el resto de elementos de la caja y pulido en chorro de arena.

Al igual que sus hermanos (e implícito en el «200» en su nombre), la nueva versión de titanio del Aquaracer Solargraph ofrece a los usuarios una hermeticidad de 20 bar, unos 200 metros. Si unimos la robustez, ligereza, tamaño universal, y hermeticidad de su caja con la buena legibilidad de su esfera y las bondades de su carga solar y una increíble reserva de marcha, cumple ampliamente con las expectativas de TAG Heuer: un reloj deportivo muy capaz y sin preocupaciones para el usuario.

A pesar de tener una construcción externa significativamente diferente a la del modelo Solargraph inaugural, la esfera de la nueva versión de titanio parece ser prácticamente idéntica. Frente a una superficie de rayos de sol negra semitranslúcida con líneas horizontales, se aplican índices con acabado negro que se rellenan con Super-LumiNova blanco. Al igual que otros relojes que funcionan con energía solar, la superficie semitranslúcida es una característica necesaria para permitir que la luz llegue a los paneles solares que se encuentran debajo. En el perímetro de la esfera encontramos un anillo que implementa una escala de minutos impresa en blanco junto con pequeños cuadrados azulescada cinco minutos. El nombre «Solargraph» aparece sobre la clasificación de profundidad en letras de color azul, mientras que la ventana de fecha se ubica a las 3 en punto.

Tampoco cambian las agujas: manecillas de horas y minutos con acabado negro y rellenas en Super-LumiNova blanco combinadas con un segundero lacado en azul polar para combinar con el color de los índices de la escala de minutos y el texto. Mientras que la manecilla de la hora y los marcadores en el dial brillan en verde, la manecilla de los minutos y la delicada segundera central se iluminan en azul para un mayor contraste en la oscuridad.

A juego con la caja y el bisel, la nueva versión está equipada con un brazalete de titanio arenado. Con superficies completamente mates y un diseño plano de tres eslabones bastante estándar, el brazalete de titanio del nuevo Solargraph está equipado con un cierre desplegable que cuenta con un sistema de extensión integrado. Si bien en líneas generales la caja y el brazalete son prácticamente idénticas a las de la versión de acero del TAG Heuer Aquaracer, el hecho de que presente una superficie totalmente mate por chorro de arena (no hay ni un biselado pulido o satinado) le da un look de reloj-herramienta que le sienta la mar de bien.

Si bien la caja del reloj ha visto una actualización significativa, el movimiento que impulsa el nuevo TAG Heuer Aquaracer Professional 200 Solargraph de titanio es exactamente el mismo: el Calibre TH50-00, un movimiento de cuarzo movido por energía solar. Producido exclusivamente para TAG Heuer y desarrollado y fabricado en colaboración con La Joux-Perret, el Calibre TH50-00 puede cargarse con luz solar o artificial. Dos minutos de exposición directa a la luz solar son suficientes para alimentar el reloj durante todo un día, y menos de 20 horas al sol cargarán completamente el reloj, lo que permitirá que funcione hasta seis meses en completa oscuridad.

Dado que La Joux-Perret es propiedad de Citizen, es muy probable que el TAG Heuer Caliber TH50-00 se base en la tecnología Eco-Drive de Citizen. A pesar de que algunos pueden decir que estamos ante una elegante versión suiza de un movimiento Eco-Drive, eso no es necesariamente algo malo. Citizen es un líder de la industria en lo que respecta a los movimientos de relojes que funcionan con energía solar, y hacer que La Joux-Perret haga un movimiento con la tecnología Eco-Drive subyacente finalmente producirá un producto mucho mejor que si TAG Heuer tratara de hacer su propio propio calibre solar interno. En este caso, probablemente se decidió que no había necesidad de reinventar completamente la rueda, especialmente cuando la «rueda» actual es muy buena y actualmente se considera una de las mejores de la industria.

Cuando se trata de precios, la nueva versión de titanio del TAG Heuer Aquaracer Professional 200 Solargraph cuesta exactamente lo mismo que la marca ahora cobra por el modelo inaugural de Solargraph que debutó el año pasado: 2.950 euros. A pesar de que prescinde del bisel de carbono luminoso de su predecesor, me sorprende un poco ver que la nueva versión no cuesta más que el modelo original si tenemos en cuenta el uso del titanio para su caja y que ahora también está equipado con un brazalete de titanio a juego. Al mismo tiempo, hemos de tener en cuenta que el nuevo Solargraph de titanio cuesta un poco más que el Aquaracer de acero con calibre automático. Dicho esto, para aquellos a quienes les gustaba la utilidad del Aquaracer de cuarzo estándar pero no necesariamente querían tener que lidiar con los reemplazos de batería, la nueva versión de titanio del Solargraph ofrece prácticamente su misma estética pero con un toque de ligereza y robustez, además de un aumento significativo en la autonomía.

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El nombre Monza apareció por primera vez en la esfera de los relojes Heuer en 1976 para celebrar el primer título mundial de Niki Lauda con Ferrari y el título de constructor de Ferrari, de la que Heuer era socio de cronometraje técnico desde 1971. Esta fue una victoria histórica para la Scuderia, ya que no había ganado el Campeonato Mundial desde John Surtees en 1964. El modelo debía llamarse Módena en honor a la ciudad natal de Ferrari, pero finalmente se eligió el nombre del circuito de carreras más reconocido de Italia.

El Heuer Monza original fue el primer reloj con caja negra de la firma y celebró la asociación de la marca con el equipo Ferrari de Fórmula 1 a través de sus llamativos detalles en rojo Rosso Corsa. Cuando el TAG Heuer Monza regresó a principios de la década de 2000, trajo consigo un nuevo enfoque en el estilo inspirado en principios del siglo XX y un diseño de caja completamente nuevo. El último TAG Heuer Monza se lanzó en 2016 y rápidamente se convirtió en uno de los relojes más reconocidos de ese año, debido a su enfoque de «lo mejor de ambos mundos» que combina un diseño moderno de caja de titanio recubierto con DLC con toques evocadores de los años 70 sin copiar directamente el original.

Para 2023, el nombre de Monza vuelve a la palestra, TAG Heuer y, al igual que los anteriores, trae consigo un nuevo estilo innovador. El nuevo TAG Heuer Monza Flyback Chronometer exhibe un moderno y agresivo diseño que se combina con una buena mecánica al mismo tiempo que rinde homenaje a los referencias Monza que lo precedieron: caja de carbono, esfera esqueletada, detalles en vivos colores y el excelente calibre Heuer 02 COSC Flyback.

Aunque la caja de 42 mm de ancho del TAG Heuer Monza Flyback Chronometer puede compartir la geometría y dimensiones generales con el Monza 2016, pocas similitudes más le podemos encontrar. La diferencia más obvia es el material de la caja: en lugar del titanio con revestimiento de DLC negro del Monza anterior, el Monza Flyback recurre al más técnico y ultraligero carbono forjado en negro mate. Este material de aspecto jaspeado y estriado le confiere a la caja semi-almohadillada un look más agresivo, complejo y moderno. Otra diferencia es que opta por el acero con revestimiento de DLC negro para su corona y pulsadores de tipo pistón para unificar la estética dark. Junto a una trasera de zafiro, el TAG Heuer Monza Flyback Chronometer  es hermético hasta 10 bar (unos 100 metros).

Aunque la esfera esquelética del TAG Heuer Monza Flyback Chronometer es un cambio radical con respecto a las iteraciones anteriores de Monza, en cierto modo este diseño futurista reinterpreta el espíritu del Monza original. Sobre la estructura esqueletada asimétrica de la esfera negra, encontramos las manecillas de tipo bastón en blanco y la trotadora central en azul intenso, el mismo color que los índices horarios rectangulares, y la combinación de escala taqumétrica y pulsómetro en el realce de la esfera. Esta última, resaltada en azul, está graduada a 15 segundos y ocupa el primer cuarto de vuelta.

Si el primer Monza implementaba detalles en rojo como socio de Ferrari, en la actualidad TAG Heuer está asociado con Red Bull Racing. Es por ello que se combina en el azul y rojo característicos de la firma de bebida energética. Las subesferas a las 3 y las 6 en punto son de zafiro teñido de azul, logrando un equilibrio razonable entre la legibilidad y el impacto visual de un diseño de esqueleto completo. TAG Heuer mantiene la ventana de fecha a las 9 horas (enmarcada en rojo) completamente esqueletizada, pero le suma un detalle que contribuye decisivamente a su legibilidad en condiciones de poca luz: la rueda de fecha es negra, pero está colocada sobre un fondo con Super-LumiNova azul a juego con la luminiscencia de los índices horarios y las manecillas de horas y minutos. El color rojo también está presente en las manecillas del totalizador de 30 minutos a las 3 horas y del pequeño segundero a las 6 horas.

TAG Heuer implementa el cronógrafo automático Calibre Heuer 02 COSC Flyback. Anteriormente solo disponible en la línea Autavia, suma la función flyback y el certificado COSC al cronógrafo insignia de la firma, el Heuer 02. Mantiene su gran reserva de marcha de 80 horas a una frecuencia de 28.800 alternancias por hora. Decorativamente es muy similar al Heuer 02 estándar, con Côtes de Genève verticales en los puentes, rotor también esqueletado inspirado en una rueda recubierta de negro rematado por Côtes de Genève y la distintiva rueda de pilares en rojo intenso en la parte superior. 

El TAG Heuer Monza Flyback Chronometer se entrega con una correa de caucho textil con pespunte en azul y un cierre desplegable. Está disponible exclusivamente a través de las boutiques TAG Heuer, distribuidores autorizados y la plataforma de comercio electrónico de la firma con un precio de 13.500 CHF.

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La caja de acero de 39 mm del TAG Heuer Carrera Chronograph 60th Anniversary luce el mismo diseño de inspiración vintage que la marca ha utilizado en los últimos años para todos sus lanzamientos de estilo retro del Carrera, que mantiene los items más característicos del diseño original, es decir, asas biseladas, un perfil de caja elegante y un delgado bisel pulido. Esta caja es 3 mm más grande que el Carrera original de 36 mm, pero conserva, modernizado, todo el espíritu del vintage al tiempo que conserva la firma clásica de Heuer en su corona a las 3 en punto. A pesar de este incremento en el diámetro, la principal diferencia externa es su trasera de zafiro, que presenta grabado un número de serie de edición limitada.

Si externamente las similitudes son evidente, la esfera va un punto más allá, siendo una recreación increíblemente fiel del Carrera 2447 SN original. El único cambio visual importante es el intercambio posicional de las subesferas de horas y minutos del cronógrafo, con el totalizador de 12 horas a las 9 en punto en lugar de la ubicación original a las 3 en punto. Obviamente, esta es un cambio obligado por la arquitectura del calibre Heuer 02, pero prácticamente todo el resto de elementos reflejan con precisión el look del original de los años 60, desde los índices rectangulares biselados hasta el grosor de la tipografía del logotipo de Carrera impreso a las 12 en punto.

Al igual que el Carrera de primera generación, el enfoque estilístico de la esfera del Carrera Chronograph 60th Anniversary es el minimalismo, el equilibrio y la legibilidad, y logra este objetivo en gran medida con un diseño abierto y bien proporcionado sin fecha. La superficie de la esfera plateada con rayos de sol ofrece una textura granulada que crea un bello matiz de luces y sombras. Las subesferas negras de estilo panda a las 3, 6 y 9 en punto agregan una mayor complejidad gracias a su acabado azurage, mientras que el Super-LumiNova de las agujas de tipo bastón y los pequeños dots que acompañan a los índices horarios aplicados son de un cálido tono beige (¿preferís esta imitación vintage o la típica tonalidad verdosa?).

En su interior late el cronógrafo automático Heuer 02. Este calibre se ofrece como la referencia para los cronógrafos de gama alta de la marca en los últimos años y sitúa a TAG Heuer como líder en su segmento con una rueda de pilares y un sistema de activación de cronógrafo con embrague vertical combinados con una gran reserva de marcha de 80 horas, todo ello a una frecuencia de 28.800 alternancias por hora.

El acabado del Heuer 02 incluye Côtes de Genève en los puentes esqueletados, una insignia Heuer grabada, un rotor esqueletado estilo rueda revestido de negro con Côtes de Genève adicionales y una rueda de pilares revestida en negro para resaltar la complicación del cronógrafo en acción.

Si bien la edición limitada TAG Heuer Carrera Chronograph 60th Anniversary puede no ser el diseño más revolucionario de la marca en 2023, el renacimiento de una referencia clásica de Carrera rinde un excelente homenaje a seis décadas de la colección más destable y duradera de TAG Heuer con una estética atractiva y rendimiento solvente. Solo se fabricarán 600 ejemplares del TAG Heuer Carrera Chronograph 60th Anniversary, y su precio es de 7.100 €.

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Con una anchura de 42 mm, el nuevo TAG Heuer Carrera Chronograph en oro amarillo comparte el diseño general de la caja con la familia Carrera Chronograph estándar. Sin embargo, esta forma familiar adquiere un carácter más brillante y dinámico, a la vez que vintage, gracias al oro amarillo 3N. El delgado bisel inclinado, la carrura cepillada en contraste con el pulido de las superficies planas, los robustos pulsadores de tipo pistón y las afiladas asas facetadas.

En la parte trasera, TAG Heuer toma un rumbo más moderno con un fondo de caja de zafiro que permite observar el calibre Heuer 02. Al igual que sus homólogos de acero, el nuevo TAG Heuer Carrera Chronograph en oro ofrece una respetable resistencia al agua de 100 metros.

Junto a la pesada caja de oro amarillo, la esfera es, sin duda, la pieza central de este reloj, e igual que ella, su diseño se hereda del modelo de acero. A pesar de ello, el contraste cromático, el material y el acabado hacen que esta versión sea sorprendentemente diferente y adquiera personalidad propia.

La superficie de la esfera negra decorada con rayos de sol negros proporciona un telón de fondo limpio sobre el que resaltan los elementos en oro amarillo: las manecillas de horas y minutos de tipo bastón, la estilizada trotadora central, los índices aplicados, el discreto pequeño segundero, el marco de la ventana de fecha a las 6 horas y el emblema TAG Heuer aplicado a las 12 en punto. Aún más espectacular, las dos subesferas a las 3 y a las 9 horas (totalizadores de 30 minutos y de 12 horas respectivamente) también están chapadas en oro, con los anillos exteriores inclinados y las superficies con azuré que brindan una gran cantidad de reflejos y sombras que realzan el brillo y textura del oro amarillo.

En su interior late el habitual calibre Heuer 02, la columna vertebral de las ofertas de gama alta de la marca en los últimos años. Con una frecuencia de 4 Hz (28.800 alternancias por hora) ofrece una excelente reserva de marcha de 80 horas. Sus puentes lucen Côtes de Genève verticales, el mismo grabado que implementa el rotor esqueletado oscurecido. Este rotor negro se combina con la esfera, mientras que la firma agrega un toque unificador adicional con una rueda de pilares dorada. Para completar el aspecto deportivo refinado retro, TAG Heuer entrega el reloj con una correa de piel de aligátor negra.

El TAG Heuer Carrera Chronograph en oro amarillo ya está disponible a través de las boutiques TAG Heuer, socios minoristas seleccionados y la web de la marca, con un precio de 20.750 €.

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Esta exclusiva edición está engastada con más de 700 diamantes (3,9 quilates en total) en el el bisel, asas, brazalete y los índices horarios de la esfera nacarada. La caja es de acero engastado con diamantes en las asas (0,2 cts), con una corona de oro rosa y un bisel fijo de oro rosa engastado con 60 diamantes (0,5 cts). La esfera de nácar brillante cuenta con 11 índices pulidos y facetados chapados en oro rosa, cada uno de ellos engastado con un diamante (0,09 quilates) y una ventana de fecha a las 6 horas. Las agujas de las horas, los minutos y los segundos, pulidas, facetadas y chapadas en oro rosa, ofrecen un suave contraste con la esfera para mejorar su legibilidad.

El fondo atornillado de la caja incluye un cristal de zafiro a través del cual se puede observar el habitual movimiento automático Calibre 9 con su masa oscilante chapada en oro rosa personalizada. Y tan espectacular como la caja es el brazalete de acero y oro rosa, pavimentado con diamantes en eslabones alternos (3,12 quilates), mientras que el cierre desplegable de acero pulido lleva grabado el escudo de TAG Heuer.

Este TAG Heuer Carrera Date sólo se producirá en cantidades limitadas para las boutiques TAG Heuer y posteriormente podrá adquirirse por encargo.

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La cultura pop agrega ligereza y desenfado a la relojería mecánica, pero no es una dirección desconocida para TAG Heuer, que jugó con este patrón por primera vez el año pasado con el Connected Super Mario. Fue un éxito, ya que esa edición se agotó rápidamente, demostrando el atractivo del fontanero italiano y lo acertado de su decisión. Pero el Connected era un reloj inteligente, mientras que los dos nuevos lanzamientos son mecánicos, con los que la firma traspasa esa atractiva colaboración a los aficionados a la relojería tradicional.

El Formula 1 cronógrafo es básico y está animado por múltiples elementos que nos conectan con Mario Kart, tanto en la caja de acero de 44 mm como en la esfera. En la primera, el logotipo del juego está grabado en el bisel taquimétrico de cerámica pulida negra, la «M», símbolo de Mario, está grabada en la corona y lacada en rojo, mientras el logotipo de Mario Kart aparece en el fondo de caja atornillado junto con la silueta del famoso personaje en un coche de carreras.

Por su parte, la esfera presenta un diseño a cuadros de color negro y antracita que parece fibra de carbono, y totalizadores personalizados con una que recuerda al asfalto, en los que aparece Mario en el indicador de segundos ubicado a las 9, rodeado de un círculo en color rojo. Este inconfundible color típico de Mario también está presente en la aguja central lacada, en el contador de cronógrafo de las horas y en la escala de 60 segundos o minutos del realce. Pero su elemento más sorprendente es que la ventana de fecha a las 3 intercala algunos elementos de Mario Kart, entre ellos Bill Bala, el Plátano, etc., en lugar del número de la fecha.

Limitada a 3.000 unidades, el TAG Heuer Formula 1 X Mario Kart Limited Edition (cronógrafo) está equipado con el habitual Calibre 16 de la colección y se entrega con una correa de piel de becerro texturizada negra con diseño personalizado y forro rojo. El tourbillon es esencialmente una iteración divertidamente caprichosa del cronógrafo con tourbillon de TAG Heuer. En titanio y con un diámetro de 45 mm, la caja también dispone de un bisel cerámico negro con el logo de Mario Kart y escala taquimétrica, además de la «M» grabada y lacada en rojo en la corona. Su precio es de 4.150 €.

Pero si la caja no se desvía mucho de la versión cronográfica, la esfera es totalmente diferente: está parcialmente calada e implementa un tourbillon volante a las seis en punto que lleva a Mario en su kart, Spiny Shell y Bullet Bill en su carro. Su agresivo diseño calado lleno de ángulos está potenciado visualmente por el vivo contraste entre el color negro base y el reborde en rojo de sus múltiples líneas, agregando deportividad además de profundidad.

Late al ritmo del Calibre Heuer 02T, un cronógrafo automático con rueda de pilares (lacada en rojo) y embrague vertical y, por supuesto, con un tourbillon volante. Visible a través de la trasera de zafiro, su rotor luce un rotor calado con la silueta de Mario y su kart por triplicado.

El TAG Heuer Formula 1 X Mario Kart Limited Edition (cronógrafo tourbillon) es una edición limitada a 250 unidades que se acompaña con la misma correa que el cronógrafo. Su precio es de 26.130 €.

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Presentado por primera vez en 1972, el Porsche 911 Carrera RS 2.7 revolucionó el mercado al final de la primera generación del 911. En su momento fue el automóvil de producción alemana más rápido de la época y el 911 más potente disponible para la conducción en carretera. Ligero y aerodinámico, fue también el primer deportivo para carretera del mundo en contar con un alerón delantero y uno trasero (que pronto se conocería como «cola de pato») que garantizaba una mayor estabilidad de conducción y una velocidad máxima más elevada. Las ruedas delanteras y traseras tenían una anchura diferente para aumentar la velocidad en las curvas y mejorar la frenada. El RS 2.7 era un vehículo homologado para su uso en carretera, pero también diseñado para permitir a los clientes participar en carreras.

Disponible en acero inoxidable u oro rosa, la caja pulida de 42 mm de diámetro  del TAG Heuer Carrera x Porsche RS 2.7 sigue en gran medida el las líneas de la actual colección Carrera: asas facetas, bisel estrecho pulido y robustos pulsadores tipo pistón. Pero diferenciándolo del resto de modelos, la carrura izquierda muestra el nombre Carrera  junto a una franja que va de asa a asa que resalta los contornos de la caja y la inclinación de las asas. Si en la caja de oro este detalle está grabado y resulta bastante discreto, en la versión en acero resulta mucho más impactante debido a que está lacada en azul. Este homenaje no será del gusto de todos, pero el hecho de implementarse a las 9 horas ayudará a que pase más desapercibido. Como era de esperar, tanto el color como la tipografía redondeada se inspiran directamente del Porsche 911 Carrera RS 2.7.

Para la versión en acero, la esfera continúa con el motivo azul de la caja, mientras que en el modelo de oro rosa recurre al icónico color rojo de Porsche Guards Red. Implementan detalles en azul o rojo dispuestos sobre una esfera de base opalina blanca. El anillo que enlaza los índices aplicados, la escala perimetral de minutos/segundos y el segundero central le dan a este diseño un carácter más deportivo respecto al Carrera estándar de 42 mm. Pero visualmente, el punto focal que atrae las miradas es el totalizador de 30 minutos del cronógrafo a las 3 en punto.

Su escala exterior elevada es sorprendentemente simple y gráfica, con bloques de un minuto en colores alternados cada cinco minutos en azul o rojo y blanco que forman el registro completo de 30 minutos. No es una solución estética nueva para TAG Heuer, pero en estos dos modelos se destaca por su limpieza, simplicidad y y uso medido del color. La adición de azurage en las dos subesferas de 30 minutos y de 12 horas ayuda a romper visualmente el vasto espacio negativo de la superficie de la esfera principal, al tiempo que otorga una mayor sensación de complejidad. Igual que en el Carrera estándar, el Carrera x Porsche RS 2.7 resta protagonismo al pequeño segundero ubicado a las seis, reduciéndolo a un minimalista cruz intersectada por la ventana de fecha en su segmento inferior. La consecuencia de esta discreción es que, visualmente y a primera vista, el Carrera x Porsche RS 2.7 parece un bicompax.

TAG Heuer equipa el Carrera x Porsche RS 2.7 con su calibre Heuer 02, un cronógrafo de remonte automático que se ha convertido en el movimiento insignia de facto de la marca en los últimos años, abriéndose camino en la mayoría de las ofertas de cronógrafos de nivel superior de TAG Heuer. El rendimiento del Heuer 02 sin duda lo respalda, con una considerable reserva de marcha de 80 horas y una frecuencia de 4 Hz, a la que debemos unir una rueda de pilares y un sistema de accionamiento del cronógrafo con embrague vertical. El acabado del Heuer 02 es atractivo, con Côtes de Genève a lo largo de los puentes esqueletados y un estilizado rotor calado inspirado en los volantes del Porsche 911 moderno.

TAG Heuer entrega el Carrera x Porsche RS 2.7 con correas muy diferentes según su versión. La caja de oro rosa ofrece un aspecto más clásico, combinando el reloj con una correa de piel de aligátor de color rojo oscuro con una hebilla de oro rosa a juego. En cambio, el modelo de acero se combina con una llamativa correa NATO de tela blanca con el logotipo de Porsche y Carrera, logrando un look mucho más informal y racing. Por suerte, si nos decantamos por la deportividad del modelo de acero podemos optar por combinarlo con un brazalete de acero con eslabones en forma de H.

Ambas esferas me parecen espectaculares, sobretodo en la versión en acero y azul… a pesar de que hubiera preferido que la carrura izquierda mostrara el más discreto grabado que luce la caja de oro en vez del lacado en azul. Solo se fabricarán 500 ejemplares del TAG Heuer Carrera x Porsche RS 2.7 en acero, mientras que el modelo de oro rosa se limitará a 250 unidades. Sus respectivos precios son 7.450 € y 22.300 €.

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Inspirado en el icónico modelo de buceo Heuer 844 de 1978, el Aquaracer original estableció seis características distintivas en su diseño: un bisel giratorio unidireccional, una corona atornillada, un cristal de zafiro, manecillas e indicadores horarios luminiscentes, un cierre de seguridad doble y una excelente resistencia al agua. Si bien estos son los fundamentos del Aquaracer, los modelos GMT cuentan con una variación imprescindible: un bisel bidireccional para facilitar el ajuste de la segunda zona horaria.

Con 43 mm de ancho, la caja de acero del TAG Heuer Aquaracer Professional 300 GMT hereda las forma del tres agujas, con asas angulares más cortas, una carrura con biselado pulido y un acabado dominado por un fuerte cepillado direccional. Por supuesto, como el resto de la línea, la característica más distintiva del Aquaracer Professional 300 GMT es su bisel de acero dodecagonal, que ahora tiene un borde estriado y un anillo cerámico resistente a los arañazos que implementa una escala de 24 horas y se divide en dos colores para diferenciar el día y la noche.

En un nuevo esquema de color, la mitad azul oscuro del anillo se extiende desde las seis de la tarde hasta las seis de la mañana, mientras que la otra mitad en blanco representa las 12 horas restantes del día. El emparejamiento con una manecilla GMT altamente legible gracias a su lacado en amarillo elimina cualquier duda posible en la lectura de la segunda zona horaria. Según TAG Heuer, la paleta de colores azul, blanco y amarillo se eligió deliberadamente para “representar el cielo, el agua, el sol y las olas rompiendo cerca de la orilla”. La esfera azul a juego presenta las reconocibles ranuras horizontales de la colección.

La trasera está presidida por un sólido fondo de caja grabado que presenta su versión angulosa y futurista del motivo clásico del casco de buceo con una textura mate. A pesar de la inclusión de la complicación GMT, el TAG Heuer Aquaracer Professional 300 GMT mantiene una hermeticidad de 300 metros.

TAG Heuer prosigue con el diseño de la esfera del Aquaracer Professional 300 GMT dentro del esquema general de la actual colección, con solo unos pocos cambios. El fondo del dial azul exhibe la textura en «tablones de cubierta» con ranuras horizontales que le confieren mayor dinamismo visual y un cepillado de rayos de sol. La firma complementa el color intenso y profundo de la esfera con detalles en el mismo enérgico amarillo de la aguja GMT en el segundero central y el texto de la esfera a las 6 en punto. El resto del diseño de la esfera es el habitual de los Aquaracer, con las manecillas en forma de espada (minutera) y de pala (horaria), índices facetados aplicados que se hacen eco de las formas angulares de la caja y el bisel (trapezoidales en las posiciones cardinales) y la ventana de fecha acompañada por la en mi opinión prescindible lupa a las seis en punto, aportando simetría al conjunto.

En su interior encontramos el conocido movimiento automático GMT Calibre 7 basado en el ETA 2892-A2. El Calibre 7 ha sido un pilar de la gama de TAG Heuer durante años y su rendimiento sigue siendo sólido, con 50 horas de reserva de marcha mientras late a una frecuencia de 4 Hz (28.000). Además de la hora y la fecha, muestra una zona horaria adicional en la escala de 24 horas, pero hemos de tener en cuenta de que en este mecanismo, la corona ajusta la manecilla GMT en incrementos de una hora, no la hora local.

TAG Heuer completa el Aquaracer Professional 300 GMT con un par de opciones de correa. En primer lugar, la versión angular y totalmente cepillada de la marca del clásico brazalete  de tres eslabones en acero. Para aquellos que buscan un aspecto más deportivo y contemporáneo, el reloj también puede equiparse con una correa de caucho en azul marino intenso. El precio de venta se sitúa en los 3.600 € si optamos por el brazalete, bajando hasta los 3.300 € si nos decantamos por la correa de caucho.

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Al igual que el Connected Calibre E4 estándar, la caja del TAG Heuer Connected Calibre E4 – Porsche Edition mide 45 mm de diámetro y está fabricada en titanio con tramiento DLC negro. Su forma comparte la misma versión suavizada del modelo estándar del Carrera, incluidas las asas facetadas y una carrura más fluida y curvilínea. Sin embargo, el elemento más llamativo es el uso del tono pálido y futurista Frozen Blue utilizado por Porsche en el Taycan. Los pulsadores redondeados y ahusados ​​y la corona de goma firmada presentan detalles en este color, mientras que el bisel de cerámica negra pulida agrega toques lacados en Frozen Blue en el índice «100» dispuesto a las 12 en punto, así como el emblema de Porsche grabado a las 6 en punto.

En la trasera, TAG Heuer añade un grabado conmemorativo que rodea el habitual conjunto de sensores, incluyendo un monitor de frecuencia cardíaca, una brújula, un acelerómetro, un giroscopio, un barómetro y un micrófono, junto con un sensor integrado NFC para poder utilizar sistemas de pago contactless. Aunque su hermeticidad de 50 metros puede no ser espectacular desde la perspectiva de un entusiasta de los relojes, está en gran medida en línea con el mercado actual de relojes inteligentes.

La esfera con pantalla táctil OLED del Porsche Edition ofrece la misma pantalla brillante y de alto contraste que los modelos Calibre E4 estándar, aunque le añade un conjunto de opciones exclusivas. Primero está la opción de esfera «Circuit», inspirada en las placas de los circuitos impresos y en los circuitos de carreras, ofreciendo un efecto visual animado que conecta los relojes TAG Heuer y los coches Porsche con una sensación de tecnología y velocidad.

Los reflejos de Frozen Blue sobre las capas de diseños lineales complejos hacen que el «Circuit» se destaque inmediatamente, aunque esta misma complejidad podría generar problemas de legibilidad. Junto con la opción de esta esfera única, el Connected Calibre E4 – Porsche Edition agrega una serie de complicaciones a medida para los propietarios de Porsche que emparejan su automóvil con el reloj. Disponible para la mayoría de los modelos Porsche 2022 y posteriores, estas complicaciones incluyen el kilometraje total del automóvil, un atajo para ajustar los controles de calefacción y aire acondicionado del automóvil, el porcentaje actual de la batería del automóvil (para el Taycan y los modelos híbridos enchufables actuales), la autonomía actual del vehículo, tanto en lo que respecta a los modelos eléctricos con la batería, como con los de gasolina.

Más allá de estas novedades exclusivas, el Connected Calibre E4 – Porsche Edition ofrece a los usuarios el mismo amplio espectro de funciones que la variante estándar, incluida la capacidad completa de reloj inteligente, un cronógrafo, un temporizador de cuenta regresiva, alarmas y la aplicación Sports Watch personalizada de TAG Heuer, que ofrece seguimiento deportivo. Apps diseñadas para golf, correr, andar en bicicleta, nadar y hacer ejercicio en general. porcentaje actual de la batería del automóvil (para el Taycan y los modelos híbridos enchufables actuales), la autonomía actual del vehículo antes de que se agote la batería y, para los modelos de gasolina, la autonomía actual hasta que se agote el depósito de combustible.

TAG Heuer impulsa el Connected Calibre E4 – Porsche Edition con el procesador Qualcomm Snapdragon Wear 4100+, compartido con el resto de la familia de relojes inteligentes Calibre E4. Equipado con el sistema operativo Wear2 de Google que ejecuta una serie de aplicaciones personalizadas diseñadas por TAG Heuer, el Snapdragon Wear 4100+ es un motor inteligente sólido y moderno. TAG Heuer afirma que la batería dura 24 horas después de una carga completa de 90 minutos, incluso cuando usa hasta cinco horas de la aplicación de golf que consume mucha energía. Gracias a la conectividad Bluetooth 5.0, Snapdragon Wear 4100+ también ofrece velocidades de transferencia de datos realmente competitivas.

Para completar el diseño, TAG Heuer combina el Connected Calibre E4 – Porsche Edition con una correa texturizada con efecto de carbono en piel de becerro negra. Esta correa con revestimiento de goma mantiene viva la sensación deportiva futurista del conjunto. El TAG Heuer Connected Calibre E4 – Porsche Edition estará disponible a través de distribuidores autorizados en septiembre de 2022. Su precio es de 2.600 €.

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