El original proceso que ha dado como resultado este Les Cabinotiers Homage to Pierre Paul Rubens, se inició en el 2020. De él hablamos en un artículo que publicamos en diciembre del mismo año, en el que explicábamos la filosofía y las fases que debería superar este reloj, nacido de la colaboración entre su futuro propietario, Vacheron Constantin y el Museo del Louvre.

Como ya hemos comentado, el proceso se inició con su anuncio en diciembre del 2020, el mismo mes en el que se realizó la subasta para determinar el futuro propietario del reloj. A partir de ahí, esta afortunada persona, el Louvre y Vacheron Constantin eligieron cual sería la obra pictórica que se reproduciría en su esfera. Luego vino el proceso artístico de los especialistas de la manufactura ginebrina que ha dado como fruto el Vacheron Constantin Les Cabinotiers Homage to Pierre Paul Rubens.

La propuesta inicial era plasmar la obra pictórica elegida en la esfera del reloj mediante técnicas de esmaltado. Dado el carácter monocromático de esta obra de Rubens, el maestro esmaltador de Vacheron Constantin eligió el esmalte en miniatura y el esmalte grisalla, una técnica esta última especialmente utilizada en obras de este carácter. Para hacernos una idea de la complejidad del trabajo efectuado, basta mencionar que se han utilizado nada menos que 20 tonos distintos de marrón para plasmar godas las sutilezas del dibujo original de Rubens.

El resultado final es tan exquisito como aparentemente sobrio ya que la complejidad de los detalles de la pintura solo se apreciaran mediante una observación muy cercana. Por otra parte, esta discreción convierten a este Vacheron Constantin Les Cabinotiers en un reloj perfectamente utilizable en un uso diario, aunque dudo que alguna vez abandone el hogar de su propietario.

Con una lógica estética absoluta, el material elegido para elaborar la caja ha sido el oro rosa, que ofrece una tonalidad en la misma gama cromática que la pintura que se representa en la esfera. Su diámetro es de 40 milímetros y su grosor de tan solo 9,42 mm.

El fondo de la caja cuenta con un cristal de zafiro que permite admirar el movimiento y también con una tapa maciza de oro que se abre o cierra mediante bisagras, que también ofrece la posibilidad de la personalización que desee su propietario mediante un huecograbado manual.

En el interior de esta caja encontramos el calibre 2460 SC. Se trata de un movimiento de carga automática cuyo volante oscila a una frecuencia de 28.800 alternancias por hora y ofrece una reserva de marcha de 40 horas.

Una característica muy especial de este movimiento es que su masa oscilante, realizada en oro de 22 quilates, se ha decorado con un grabado que reproduce la fachada este del Museo del Louvre, algo que evidentemente se ha realizado expresamente para el calibre que equipa este reloj.

Sobra decir que el Vacheron Constantin Les Cabinotiers, Homage to Pierre Paul Rubens es una obra de arte relojera tan espectacular como exquisita. Lo negativo es que, por mucho dinero que tengamos, no la podremos adquirir ya que se grata de una pieza única.

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Las indicaciones retrógradas se basan en una aguja o agujas que recorren un índice, algo común a todos los relojes con este sistema de indicación. La diferencia en los retrógrados es que los indices no completan un circulo completo sino un arco. Por ello, la aguja no sigue un recorrido continuo, deteniéndose al final del arco y retrocediendo instantáneamente a su punto de partida para iniciar una nueva medición. Este tipo de indicación implica una complejidad mecánica mucho mayor que una convencional y en realidad no aporta ninguna ventaja funcional, pero el encanto y la fascinación que crea entre los conocedores y apasionados de la relojería es enorme.

Como veremos a continuación, cuatro de las seis principales novedades que nos ha presentado Vacheron Constantin en Watches and Wonders 2023 ofrecen indicaciones retrógradas. Además del encanto que aporta este tipo de indicación, la legitimidad de Vacheron en esta especialidad es absoluta, ya que la encontramos en muchos de sus relojes históricos.

Les Cabinotiers Dual Moon Grand Complication

Iniciamos el recorrido por el más complejo de los relojes que nos ha desvelado Vacheron. Se trata del Les Cabinotiers Dual Moon Grand Complication, un reloj que por su nivel de innovación y de complejidad mecánica merece sin duda subir a lo mas alto del podio entre las novedades de Vacheron Constantin.

No obstante, si tenemos en cuenta que se trata de un reloj de la gama «Les Cabinotiers», lo que implica que se trata de una pieza única. Por tanto, su interés real para los apasionados de la relojería es prácticamente nula. Solo lo podrán hipotéticamente adquirir si su propietario decide venderlo algún día.

Centrándonos en los aspectos técnicos, este Cabinotiers incorpora un nuevo mecanismo, el Calibre 2755 TMRCCQP, un moviminento que ofrece 11 complicaciones entre las que cabe destacar la repetición de minutos, el calendario perpetuo, la carta celeste y la fecha retrógrada. Este movimiento está protegido por una caja de oro blanco de 46 mm de diámetro y 17,10 mm de grosor.

Traditionnelle Tourbillon Retrograde Date Openface

Seguimos con las más altas complejidades mecánicas de la mano de este Traditionnelle, que nos ofrece las complicaciones de tourbillon, fecha retrógrada y estructura esqueleto. Este es un conjunto de complicaciones inédito en la colección Traditionnelle y por tanto le otorga la calificación de gran novedad. En este caso, aunque su complejidad limitará su producción, sí estará al alcance de los grandes coleccionistas.

La caja está realizada en oro rosa y mide 41 milímetros de diámetro por 11,07 mm de grosor. La esfera, del estilo esqueleto contemporáneo (sin transparencia) deja a la vista buena parte del anverso del Calibre 2162 R31. Su precio solo se comunica bajo pedido.

Traditionnelle Tourbillon

Seguimos en la gama Traditionnelle, pero abandonamos momentáneamente las complicaciones retrógradas. Lo que no abandonamos son las grandes complicaciones ya que estamos ante un reloj con tourbillon.

Esta es una novedad de carácter menor ya que el catálogo de Vacheron Constantin ya contaba con un Traditionnelle Tourbillon, realizado con oro rosa y esfera plateada. Lo que aporta esta nueva versión es el oro blanco con el que está realizada su caja y el tono verde de su esfera, el color de moda en Ata Relojería. Este Traditionnelle Tourbillon equipa el Calibre 2160/1, un movimiento de carga automática cuyo volante oscila a una baja frecuencia de 18.000 alternancias por hora y ofrece una gran reserva de marcha de 80 horas. Su precio también se facilita bajo pedido.

Patrimony Retrograde Day-Date

Cambiamos a la colección Patrimony con una nueva versión de uno de los relojes más exquisitos y personales del catálogo de Vacheron; el Retrograde Day-Date. Con este reloj retomamos las complicaciones retrógradas y además lo hacemos por partida doble ya que mediante este método nos indican la fecha y el día de la semana.

Desde su lanzamiento, con caja de oro rosa y esfera crema, hemos visto diversas variantes, como la que presentaba una esfera azul presentada en el salón SIHH del año 2019 (artículo). Ahora nos llega esta exquisita variante con caja de oro blanco y esfera tono salmón con acabado soleado.

En su interior encontramos el mismo Calibre 2460 R31R7 que ya equipaba las anteriores versiones de este reloj. La exquisita estética de la esfera también se mantiene inalterada. De momento, el precio del Patrimony Retrograde Day-Date sigue constando como «bajo pedido» pero por lógica deberían ser los mismos 51.500 € que las restantes tres versiones de este reloj.

Overseas Moon Phase Retrograde Date

Con el Overseas Moon Phase Retrograde Date llegamos al reloj que objetivamente merece ser clasificado como la novedad más importante de Vacheron Constantin en Watches and Wonders 2023. Merece este honor porque aporta un conjunto de complicaciones inéditas en la colección Overseas; fase lunar y fecha retrógrada. A todo ello hay que sumar que se trata del primer reloj Overseas con indicación retrógrada.

Como en los anteriores casos que hemos visto con esta complicación, el índice en forma de arco de la indicación retrógrada de la fecha preside la parte superior de la esfera. El protagonismo en la zona inferior es la indicación de la fase lunar.

El movimiento que equipa el Overseas Moon Phase Retrograde Date es el Calibre 2460 R31L, el mismo que utilizan los dos relojes de la colección Patrimony que conjuntan estas dos complicaciones. De momento, tampoco se ha comunicado el precio de este Overseas.

Overseas Lady

Finalizamos el recorrido por las novedades de Vacheron Constantin en Watches and Wonders 2023 en la misma colección Overseas, pero en este caso en sus versiones femeninas. Este carácter se lo conceden sus nuevos tamaños, de 34,5 y 35 milímetros de diámetro.

Vacheron Constantin ofrece cuatro variantes de estos nuevos Overseas: con caja de oro rosa o de acero y con o sin engaste de diamantes en su bisel. Curiosamente, las dos versiones engastadas son las que incrementan su diámetro en unos escasos 0,5 mm. Las dos versiones de orto rosa y la de acero sin engastar comparten el color azul de sus esferas. La versión de acero con engaste se decanta por el tono rosado en su esfera.

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Lo que aporta esta versión Panda del Overseas de Vacheron Constantin se limita a una cuestión estética. Por tanto, no podemos calificarla como novedad absoluta, pero puede adquirir un gran significado para los apasionados de la histórica manufactura ginebrina y de la Alta Relojería en general.

La mayoría ya conoceréis el significado del apodo «Panda» en relojería, pero nuca está de más recordarlo. Con este término se califica los relojes, concretamente los cronógrafos, que combinan una esfera blanca o plateada con unos contadores negros. Con esta estructura cromática nos recuerda al famoso oso, con el pelaje de su rostro blanco y los contornos de sus ojos negros, como si llevara un antifaz. Con el tiempo, este término Panda se ha extendido a los cronógrafos que presentan la combinación de colores inversa.

Vacheron Constantin quiere contentar a todos y nos ofrece las dos variantes. Sorprendentemente, en el comunicado de prensa y en la imágenes oficiales solo aparece el Panda convencional. Pero, si vamos a su página web y navegamos en la colección Overseas y en su variante cronógrafo, aparece también la versión inversa.

La versión «oficial» del Overseas Chronograph Panda es la que vemos al la izquierda de la imagen, con un fondo de esfera totalmente plateado que contrasta con el negro de sus dos contadores del cronógrafo y del el pequeño segundero. La versión de la derecha es la inversa y desde la óptica purista, no es un Panda, pero esto no creo que importe mucho a sus futuros propietarios. Como siempre será una cuestión de gustos personales. Yo, personalmente me decantaría por el pseudopanda de fondo negro, pero una visión en vivo del reloj siempre podría cambiar la sensación. Seguro que el inminente Watches and Wonders me ofrecerá la oportunidad.

La base de estas nuevas versiones es la de la última renovación del Overseas Chronograph, presentado en el salón SIHH del 2016 y al que dedicamos este artículo. Por tanto, dejando de lado las esfera, los nuevos Overseas Chronograph Panda no difieren en absoluto de sus predecesores. El material elegido para caja y brazalete es el acero y mantienen sus dimensiones, de 42,5 mm de diámetro por 13,7 mm de grosor.

En su interior también encontramos el exquisito mecanismo de cronógrafo que estreno la versión 2016; el calibre 5.200. Se trata de un movimiento automático de cronógrafo, controlado por un sistema de embrague vertical (lo que evita indeseados saltos de la aguja trotadora cuando se activa) y por rueda de pilares. Este último elemento tiene la originalidad de albergar en su centro la Cruz de Malta, emblema de Vacheron Constantin.

Al igual que en anteriores Overseas Chronograph, estos nuevos Panda se entregan con tres sistemas de sujeción: brazalete de acero, correa de piel de becerro y correa de caucho. Estas opciones enfatizan su versatilidad, elegancia y deportividad respectivamente. Con el sistema de cambio rápido que incorpora el reloj, la operación de intercambiar correas y brazalete se puede realizar con suma facilidad sin necesidad de herramienta alguna.

En resumen, estos dos nuevos Overseas Chronograph Panda son, sin duda, una buena decisión de Vacheron Constantin. Aparte de la originalidad de sus esferas, ofrecen dos nuevas opciones con caja de acero, de las cuales en el catálogo del Overseas solo quedaba una (con esfera azul) que unicamente se puede adquirir en las boutiques de la firma suiza. Ahora nadie se podrá lamentar de ello. El precio de ambas versiones es de 37.000 EUR.

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En cierto modo, este reloj es una continuación del Traditionnelle Tourbillon Quilin que nos presentó Vacheron en diciembre del 2020 (artículo). En ambos relojes se emplea el mismo metal noble en su caja, que también sé decora con el mismo motivo y técnica. También son equivalentes en el modo de plasmar el motivo que decora su esfera. Y lo mas importante, ambos homenajean una leyenda china.

La base empleada para este homenaje no puede ser más prestigiosa ya que Vacheron Constantin recurre al Traditionnelle Tourbillon, un reloj que presenta esta Gran Complicación del modo más puro, prescindiendo de toda indicación ajena a las horas, los minutos y los segundos, que se indican en la misma jaula del tourbillon. Este esquema genera un a gran nitidez de esfera, lo que otorga a los artesanos de Vacheron Constantin un buen espacio libre para plasmar en ella trabajos artísticos, como es la escena del Fénix y el Dragón.

La caja del Traditionnelle Tourbillon tribute to Chinese Mythology, realizada en oro rosa 5N, mide 41 milímetros m de diámetro por 11,21 mm de grosor, unas dimensiones que sin poderse considerar como «grandes», son perfectas para poder apreciar los Métiers d’Art que adornan su esfera. Todos los elementos que conforman esta caja; carrura, bisel y asas, están exquisitamente decorados mediante un grabado manual en bajorrelieve que reproduce un motivo de volutas con forma de nube.

En su esfera se plasma el motivo de la leyenda china del Fénix y el Dragón con la escenificación de estos dos animales míticos. Todo se realiza mediante apliques esculpidos en una base de oro rosa y acabados con la técnica ornamental del punzonado.

Vacheron Constantin nos presenta tres versiones del Traditionnelle Tourbillon tribute to Chinese Mythology. Estas tres variantes se diferencian entre ellas por la tonalidad empleada en el fondo de su esfera; azul, plateada o negra. Este fondo se adorna mediante un grabado guilloché al que se aplica un tratamiento galvánico para obtener los colores deseados.

Este Traditionnelle está motorizado mediante el Calibre 2160, un movimiento de carga automática equipado con un regulador tourbillon cuyo volante oscila a una frecuencia de 18.000 alternancias por horas. Su automatismo se genera mediante un rotor perimetral que ofrece una excelente reserva de marcha de 80 horas. Este esquema de rotor tiene la cualidad de no interferir en la visualización del reverso de este movimiento, el cual se puede admirar a través del fondo de cristal de zafiro con el que esta equipado el fondo de su caja.

Este peculiar tipo de rotor es trascendental para otorgar el carácter de ultraplano al calibre 2160, cuyos 5,65 milímetros de altura permiten que el grosor del conjunto del reloj solo alcance los 11,21 mm. En su conjunto, estas características son extraordinarias ya que es poco habitual un reloj con tourbillon de carga automática y aun lo es menos que sea ultraplano.

Como era de esperar, Vacheron Constantin emitirá el Traditionnelle Tourbillon tribute to Chinese Mythology en formato de edición limitada, a 16 piezas para cada una de las tres versiones. Estará disponible únicamente en Boutiques Vacheron Constantin y su precio solo se comunica bajo pedido.

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En el ámbito joyero y relojero destacó una técnica estilo bordado que decoraba las cajas y brazaletes de numerosos relojes, tanto de bolsillo como colgantes  y de pulsera. Esta decoración se caracterizaba por su especial complejidad y se expresaba en multitud de motivos ornamentales.

Vacheron Constantin 1916 – 1918 – 1923

Vacheron Constantin no fue ajena a esta tendencia y a principios del siglo 20 creó un número importante de relojes que se inspiraban en esta particular estética, de los cuales podemos ver tres en la imagen superior.

Inspirándose en estas piezas, la histórica manufactura ginebrina nos presenta ahora el Égérie Creative Edition, un exquisito reloj femenino que retoma la técnica del encaje de Burano y la conjunta con el engaste de piedras preciosas. El engaste lo encontramos tanto en la caja como en la esfera, pero es este último elemento donde se expresa todo el carácter de este reloj.

La base de esta esfera está realizada con oro blanco, sobre el cual se aplica una capa de esmalte translúcido negro. Por encima de todo es donde se realiza un complejo entramado decorativo, realizado con hilos de oro blanco y de estilo encaje de Burano, que sigue un patrón plisado realizado mediante la técnica de tapizado y grabado a mano. Esta estructura decorativa soporta un profuso engaste de de 250 diamantes talla brillante.

La apertura a través de la cual se muestra la indicación de la fase lunar se ubica a la altura de las 2 horas. Vacheron elige decorar el disco giratorio que nos muestra esta indicación mediante una capa de esmalte. Por su parte, la luna está realizada en nácar.

La caja del Égérie Creative Edition está elaborada con oro blanco de 18 quilates. Su diámetro es de 37 milímetros y su grosor de 10,35. Se trata de un tamaño generoso y acorde con las tendencias actuales, alejándose mucho de los diámetros minúsculos que caracterizaban sus antecesores femeninos de principios del siglo XX. Esta caja se decora mediante un engaste de 292 diamantes talla brillante, que sumados a los de la esfera totalizan un mínimo de 4,46 quilates. Como colofón, la corona está ornamentada con un cabujón de diamante talla rosa.

El fondo de la caja cuenta con un cristal de zafiro que nos permite admirar el mecanismo que da vida a este Égérie. Se trata del Calibre 088 L, un movimiento de carga automática cuyo volante oscila a una frecuencia de 28.800 alternancias por hora y ofrece una reserva de marcha de 40 horas.

En principio, Vacheron Constantin no anuncia ninguna limitación en la producción del El Égérie Creative Edition, aunque su propia complejidad ya limitará su manufactura a pocas piezas anuales. La distribución sí esta restringida ya que solo se realizará a través de las boutiques oficiales de Vacheron. Como suele ocurrir en relojes de este nivel, Vacheron Constantin solo facilitará su precio «bajo pedido».

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Esta nueva edición que nos desvela Vacheron Constantin sube varios peldaños su nivel de exquisitez y exclusividad, añadiéndole un profuso engaste de diamantes que cubren toda su esfera. Este tipo de engaste se denomina «tipo nieve» ya que en cierto modo emula una superficie nevada. Se caracteriza porque si está bien realizado no deja ni la más mínima superficie libre de piedras preciosas.

Para conseguir este efecto de recubrimiento total, el engaste tipo nieve recurre a piedras de todo tipo de tamaño y los implementa de un modo totalmente irregular. En cierto modo es la antítesis de un engaste convencional, que se distingue por emplear piedras preciosas de idéntico tamaño y por distribuirlas de forma regular. Por una evidente cuestión física, en este tipo de engaste convencional siempre queda una pequeña superficie, la que separa las piedras, sin cubrir.

Como podemos apreciar en la imagen, Vacheron Constantin también añade a esta versión del Traditionnelle Moon Phase un engaste adicional que cubre la carrura de su caja y la superficie lateral de las asas. Por todo esta profusa decoración de piedras preciosas que cubre la totalidad de los elementos externos del reloj, podemos encuadrarlo en la categoría denominada «full pavé», cuya traducción vendría a ser «totalmente engastado».

El Traditionnelle Moon Phase solo emplea diamantes para su decoración, todos ellos de talla brillante. Para su caja emplea 225 piedras y 548 para el engaste de la esfera. Añadiendo el que culmina la corona y los 21 engastados en la hebilla de su correa, son 795 los diamantes que decoran este Vacheron para un peso total aproximado de 4,8 quilates mínimos garantizados.

La caja está realizada en oro blanco y mide 37,5 mm de diámetro por 10,2 mm de grosor, unas dimensiones considerables para lo que se considera habitual en relojes diseñados exclusivamente para mujeres. No obstante, en ningún caso se puede considerarse como un tamaño excesivo y sigue la tendencia actual del concepto unisex en los relojes de pulsera.

Como delata su nombre, la característica mecánica que distingue el Traditionnelle Moon Phase es la indicación de fase lunar que nos ofrece. Es importante señalar que se trata de una fase lunar de alta precisión, que solo se desvía un día cada 122 años, una exactitud muy superior a la desviación de un día cada 3 años que sufre una fase lunar convencional. Adicionalmente, también ofrece una indicación de reserva de marcha, ubicada entre las 10 y las 11 horas.

La responsabilidad de su corazón mecánico recae en el calibre 1410 AS que equipa. Se trata de un movimiento de carga manual cuyo volante oscila a una frecuencia de 28.800 alternancias por hora y que garantiza una reserva de marcha de 40 horas.

El Vacheron Constantin Traditionnelle Moon Phase equipa una correa de piel de aligator de color azul que incorpora un sistema de cambio rápido. Ello permite intercambiarla con total facilidad y sin necesidad de herramientas ni de  ninguna habilidad especial. El precio de este Traditionnelle Moon Phase es de 90.500 EUR.

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Esta boutique de Vacheron Constantin en Dubai cobra todo su sentido si tenemos en cuenta la larga relación de la histórica manufactura ginebrina con Oriente Medio, que ya se prolonga más de 200 años. Si a este legado añadimos que Dubai se ha convertido en el mayor destino turístico mundial y que puede considerarse como una de las grandes capitales del lujo más exclusivo, la implantación de esta Flagship de Vacheron Constantin era casi una obligación.

Reloj de bolsillo del rey Fouad (1929)

Uno de los hechos históricos más relevantes de Vacheron lo encontramos en Egipto y en su familia real. Fue en 1927 cuando Francis Peter, presidente del Tribunal Mixto de El Cairo y ciudadano suizo, adquirió, en nombre de la comunidad suiza en Egipto, el reloj más complicado creado por Vacheron Constantin hasta la fecha. Este reloj de bolsillo fue obsequiado al rey Fouad en noviembre de 1929 en una caja de sándalo decorada con la corona real y la insignia del rey en árabe.

Otra muestra de la relación histórica con el mundo árabe, es que el príncipe Farouk de Egipto, un gran apasionado de los mecanismos de relojería, visitó la manufactura Vacheron Constantin en 1937 en compañía del Director Comercial de la época, Léon Constantin.

Ref. 10678 (1834) y Ref. 10339 (1989)

Como hecho reservado a sus boutiques más emblemáticas, la Flagship de Vacheron Constantin en Dubai alberga una selección permanente de piezas históricas. Entre ellas cabe destacar la referencia de inventario 10678, un reloj de bolsillo de oro amarillo datado en 1834 que exhibe una decoración realizada con esmalte champlevé y huecograbado. También es de reseñar el reloj de pulsera esqueleto, de referencia 10339, creado en 1989. Ambas piezas tiene en común la inspiración árabe de sus motivos ornamentales.

La Flagship de Vacheron Constantin se ubica en la planta baja del Dubai Mall y su entrada está adornada con el motivo «Mashrabiya» un patrón tradicional de la arquitectura árabe. En el interiorismo predominan los tonos dorados, creando un atractivo contraste con el azul y el blanco que predomina en algunas zonas. El conjunto estético final destila lujo y sofisticación, un efecto sin duda deseado.

Además de la zona destinada a los relojes históricos del patrimonio, en la boutique de Vacheron en Dubai también encontramos un banco de trabajo, donde un maestro relojero desarrolla sus destrezas e interactúa con los visitantes. El conjunto interno se complementa con dos salones privados destinados a tratar con los clientes en un ambiente de máxima privacidad.

Como colofón, la Boutique Flagship del Dubai Mall ofrece un recorrido interactivo por la historia de la Maison a través de los archivos digitales denominados el «Cronograma». Mediante una gran pantalla desarrollada en colaboración con el Instituto Federal Suizo de Tecnología en Lausana (EPFL), el Chronogram es una herramienta innovadora que utiliza tecnologías emergentes para digitalizar el cuerpo de archivos de Vacheron Constantin acumulados desde 1755. Ello servirá como una puerta de entrada en un archivo de miles de documentos e imágenes y sumergirse en los secretos internos de la manufactura Vacheron.

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Por algún motivo ciertamente misterioso, este Traditionnelle Femenino de 33 mm, no conserva la referencia 8159 de sus predecesores de colección y en lugar de ello pasa a inaugurar la referencia 1405T. No tengo ninguna explicación a ello ya que un cambio de color o de material de esfera no suele comportar un cambio en la referencia primaria de un reloj.

Vacheron Constantin cuenta con numerosos y variados relojes femeninos en su catálogo. Abarcan desde diseños muy especiales, como son los Heures Créatives y los Égérie, originales relojes «de forma», como los Malte, los deportivos Overseas y los más clásicos, representados por las colecciones Patrimony y Traditionnelle.

El Vacheron Constantin Traditionnelle Femenino está claramente destinado a mujeres que privilegian la discreción elegante. Se trata de una colección que se basa en una caja de geometría redonda y en un tamaño de 33 milímetros de diámetro. Esta es una mediad reducida pero no tanto como para parecer anacrónica. También existe el Traditionnelle en 30 mm de diámetro, pero se reserva a movimientos de cuarzo.

La peculiariad que ofrece este Vacheron Constantin Traditionnelle Femenino de referencia 1405T es que su esfera está elaborada con nácar blanco. Esta es una opción relativamente habitual en relojes destinados al público femenino, pero no tan común como para que pierda su pedigrí. A mí, personalmente, siempre me ha parecido una opción sumamente atractiva, que añade un plus de distinción sin entrar en terrenos de exhibicionismo.

El material elegido por Vacheron Constantin para elaborar la caja del 1405T es el oro rosa 5N (el más rojizo). Como suele ocurrir con la mayoría de relojes femeninos de corte clásico, el bisel está adornado con un engaste de diamantes, concretamente con 54 piezas de corte brillante.

El cristal de zafiro del fondo nos permite deleitarnos con el exquisito calibre 1440, un movimiento de carga manual cuyo volante oscila a una frecuencia de 28.800 alternancias por hora y ofrece una reserva de marcha de 42 horas.

Bajo la referencia 8150 tenemos dos Vacheron Constantin Traditionnelle Femenino de 33 mm, con caja de oro blanco y con caja de oro rosa, ambos con esfera opalina. Como se puede apreciar en la siguiente imagen comparativa, a cierta distancia las diferencias entre las dos versiones de oro rosa son casi inapreciables. Solo una observación cercana nos permitirá distinguir la esfera de nácar.

El precio de este nuevo Vacheron Constantin Traditionnelle Femenino con esfera de nácar es de 29.800 EUR, exactamente el mismo que el de las otras dos versiones de este reloj.

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El museo Barbier-Mueller, sito en Ginebra, es uno de los mayores y mejores museos de arte primitivo del mundo. Ayudado probablemente por su cercanía geográfica y por lo excepcional de sus obras, Vacheron Constantin decidió iniciar una colaboración cuyo primer fruto fue la excepcional tetralogía «Les Masques» presentada en el 2007. A ella siguieron, en 2008 y 2009, dos tetralogías más que, al igual que la primera, reproducían en sus esferas máscaras primitivas pertenecientes a este museo.

Vacheron Constantin Les Masques (2007)

Es evidente que «Les Masques» y la tetralogía «Métiers d’Art Tribute to great civilisations» comparten el motivo arqueológico con el que se decoran sus esferas. No obstante, hay otra coincidencia que es tanto o más importante; la firma de mostrar las indicaciones del tiempo en sus esferas.

A pesar de que bien pueden considerarse como obras de arte de pulsera, no podemos olvidar que se trata de relojes y cómo tales su función primigenia es ofrecernos la indicación del tiempo. Aquí es donde siempre surge el conflicto de prioridades entre optimizar la lectura de las indicaciones o la contemplación de la obra de arte en miniatura que se reproduce en sus esferas.

La solución de Vacheron Constantin es realmente genial ya que nos muestra las horas, los minutos, la fecha y el día de la semana a través de cuatro ventanas ubicadas en cuatro ángulos del perímetro de la esfera. Con ello podemos prescindir de agujas centrales, con lo que la contemplación de lo que se reproduce en la esfera no se ve afectada en absoluto. Además, Vacheron elige cuidadosamente la decoración del fondo de cada ventana para que coincida con la de la obra que se reproduce en cada caso. El mérito es que todo ello no perjudica en absoluto la lectura de las cuatro indicaciones.

Todas las obras arqueológicas que se reproducen en las esferas de estos «Métiers d’Art Tribute to great civilisations» tienen en común que se exponen en el Museo del Louvre. Las cuatro obras elegidas pertenecen a diversos periodos históricos, que son el Antiguo Egipto, el Imperio Persa, la Grecia Helenística y el Imperio Romano.

Aunque en distintos tipos de oro (rosa y blanco), las cuatro piezas de esta tetralogía comparten el tamaño de caja, de 42 mm de diámetro por 12,9 mm de grosor. Obviamente también utilizan el mismo mecanismo, el calibre 2460 G4/2, que equipa los cuatro discos satélites responsables de las indicaciones que antes hemos mencionado. En la parte derecha de la imagen superior podemos ver el reverso de este calibre, que tiene como peculiaridad la masa oscilante decorada con un grabado que reproduce la fachada este del Louvre.

Cada una de estas obras de arte relojeras de pulsera se emitirá en formato de edición limitada y numerada, a tan solo 5 ejemplares. La adquisición se deberá efectuar obligatoriamente a través de una boutique oficial de Vacheron Constantin.

Grand sphinx de Tanis

Iniciamos le recorrido de la tetralogía «Métiers d’Art Tribute to great civilisations» por el Grand sphinx de Tanis, una esfinge perteneciente al Imperio Antiguo de Egipto (2035-1680 a.C.)

La Gran Esfinge de Tanis, capital de los faraones de la 21ª y 22ª dinastías, tiene unas dimensiones de 1,83 metros de altura por 4,80 metros de longitud. Llegó al Louvre en 1826, como parte de la colección del cónsul británico Henry Salt. Como es habitual en las esfinges egipcias, se trata de un híbrido compuesto por el cuerpo de un león reclinado y una cabeza humana que porta la Nemes, el tocado real, así como la barba que era atributo exclusivo de los soberanos.

La Gran Esfinge de Tanis fue datada durante mucho tiempo en el Imperio Antiguo (2700-2195 a. C) pero ahora se relaciona de forma más general con el Imperio Medio (2061-1785 a. C.), el que los propios egipcios consideran como la edad de oro de Egipto. El cartucho que porta esta esfinge nos indica que probablemente fue construida para el Faraón Amenemhat II. Otros faraones, como Apofis, Merenptah y Sheshonq I, se apropiaron posteriormente de ella, estampando también sus cartuchos.

La base de la esfera está elaborada con una mezcla de esmaltes de tonalidades azul y negra, que requieren de seis fases de cocción en un horno kiln. Sus elementos decorativos están inspirados en el collar mostrado en el cartonaje del ataúd de Nakht-khonsou-irou, un material compuesto por varias capas de tejido adheridas, estucadas y pintadas. En el centro, adquiriendo todo el protagonismo, se ubica el medallón esculpido en oro que representa la cara de la esfinge. En las zonas superior e inferior de la esfera se reproducen inscripciones jeroglíficas tomadas de uno de los cartuchos de la esfinge de Tanis.

Lion de Darius

Avanzamos más de mil años en el tiempo para encontrar el Lion de Darius, una obra perteneciente al Imperio Aqueménida de Persia (559-330 a.C.)

El famoso Friso de los Leones, una decoración de cerámica pintada en ladrillos vitrificados, fue localizado en el primer patio del palacio de Darío el Grande en Susa, la capital del Imperio Aqueménida de Persia, en el suroeste del actual Irán. Tras conquistar Lidia, Babilonia y Egipto, los aqueménidas formaron uno de los mayores imperios que existió en toda la antigüedad.

Dado que los leones forman parte de un friso, el fondo de la esfera del reloj tenía que representar esta decoración de ladrillos vitrificados colocados sobre una pared. Para plasmarlo, los artesanos han optado por la técnica de la marquetería de piedra; y para acentuar la apariencia realista, eligieron fragmentos de piedra veteados, que son mucho más frágiles que los no veteados. Estas piedras son turquesas y jaspe mokaíta amarillo.

En comparación con el modelo original, el color mucho más intenso de las piedras reproduce el aspecto del friso tal y como estaba originalmente destinado a ser, antes de que las tonalidades palideciesen. El friso que rodea a la esfera estaba inspirado en la decoración de otra obra muy conocida del Palacio de Darío: el Friso de los Arqueros.

En le perímetro de la esfera encontramos un anillo decorado con una yuxtaposición de triángulos elaborados con metal labrado y esmalte champlevé. Por encima y por debajo del león, se reproducen inscripciones cuneiformes, tomadas de de una tableta inscrita en persa antiguo, grabadas con técnica de metalizado en el cristal de zafiro. En el centro de la esfera se aplica el Medallón que reproduce la figura de uno de los leones del famoso friso, realizado en oro blanco grabado a mano.

Victoire de Samothrace

Nos seguimos acercando en el tiempo y es el turno de la estatua de Victoria de Samothrace, perteneciente a la Grecia helenística de la dinastía Antigónida (277 – 168 a.C.).

La famosa estatua de Victoria de Samotracia, la diosa alada, fue descubierta en 1863 en la isla de Samotracia, en el norte del Mar Egeo y representa una ofrenda vinculada a una victoria naval. Tras la muerte de Alejandro Magno en el 323 a.C, sus generales se repartieron su legado y dieron lugar al nacimiento de tres grandes imperios, entre ellos, el de la dinastía Antigónida en Macedonia.

Durante este periodo helenístico, que concluyó con la conquista de Egipto por parte de Roma en el año 31 a.C, se sucedieron las batallas navales para obtener el dominio de la zona oriental del Mediterráneo. Una de ellas quedó majestuosamente conmemorada, mediante esta estatua de la Diosa Victoria, en el santuario de la pequeña isla griega de Samotracia.

El centro de la base de la esfera está decorado con esmalte marrón, una tonalidad que resulta muy difícil de obtener y que exige una combinación de esmaltes nada comunes, así como seis pasadas por el horno kiln. Sobre esta base se implanta una placa de cristal de zafiro donde se plasman mediante grabado metalizado las inscripciones en griego antiguo tomadas de una estela votiva del segundo siglo a.C. descubierta en Samotracia. El medallón que reproduce la figura de la estatua de la diosa Victoria está realizado en oro blanco y grabado a mano.

Buste d’Auguste

Llegamos al ultimo de los «Métiers d’Art Tribute to great civilisations» con el Buste d’ Auguste, un busto perteneciente al Imperio Romano de la dinastía Julio-Claudia (27 a.C – 68 d.C).

Este busto de Octavio Augusto, el hijo adoptivo de César, nos muestra a Augusto tocado con la corona cívica de hojas de roble, distinción que le fue concedida por decisión del Senado el año 27 a. C., cuando se convirtió en el príncipe, o primer ciudadano de Roma. En la realidad, tras su conquista de Egipto, en donde venció a Marco Antonio, aliado de Cleopatra, Augusto dio fin a un largo periodo de guerras civiles, lo que señaló el final de la República y supuso que se convirtiera en el señor de Roma.

Actualmente se considera que fue el primer emperador romano, y que estableció las bases de una organización política que duraría otros cuatro siglos. La dinastía de Julio-Claudia, de la cual él fue el primer “príncipe” concluyó con el suicidio de Nerón en el año 68 d. C.

La base de la esfera está decorada con esmalte azul verdoso, mientras que el perímetro está adornado mediante la técnica de micro mosaico de piedra. Con ello se reproduce el famoso mosaico del siglo cuarto descubierto en Lod, Israel, que ha servido de inspiración para los motivos ornamentales que se aplican en el anillo perimetral. Esta técnica es extremadamente laboriosa y delicada ya que cualquier error en la colocación y pegado de los minúsculos fragmentos de piedra requeriría volver a esmaltar la esfera con la técnica Grand Feu utilizada de base.

Se han utilizado siete tipos de piedra para realizar este micro mosaico: cuarcita, cacholong, dumortierita, mokaíta, jaspe rojo, grosularia y aventurina roja, que suman un total de 660 piezas. Para el friso exterior, realizado en huecograbado sobre oro blanco, los artesanos de Vacheron se han inspirado en otro mosaico, descubierto en Sousa, una ciudad portuaria del este de Túnez. En la base de cristal de zafiro que sirve de base al busto de Augusto, se aplica una inscripción tomada de la dedicatoria en honor del Genio (protector divino) de la ciudad de Russicada (actual Skikda, en Argelia).

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Historiques 222 – un poco de historia

La década de los años 70 fue probablemente la más trascendental de la historia para la relojería suiza. Lo fue en primer lugar por la aparición de los relojes de cuarzo, que estuvieron a un paso de acabar con esta ancestral industria. Lo fue en segundo lugar por la aparición de los relojes «deportivos elegantes» de altos vuelos. Primero fue el Royal Oak de Audemars Piguet (ref. 5402) en 1972, cuyo éxito sorprendió a propios y a extraños (artículo). Le siguió en 1976 el legendario Nautilus de Patek Philippe (ref. 3700) (artículo). Estos dos relojes surgieron de los bocetos del mismo diseñador, el también legendario Gerald Genta.

Ya solo quedaba una de las firmas que conforman el gran triunvirato histórico de la Alta Relojería; Vacheron Constantin. El éxito del Royal Oak y del Nautilus no dejaba lugar a dudas del camino a tomar y fue casi una obligación para Vacheron dar el paso en la misma dirección. Para ello, la firma ginebrina recurrió a otro de los diseñadores históricos de la relojería; Jorg Hysek. Las característica clave que habían originado el éxito de este tipo de reloj estaban muy claras; deportividad sin perder elegancia, caja de acero y brazalete integrado. Podríamos añadir un bisel y una caja que se apartaban de la redondez de los relojes clásicos, pero Vacheron obvió este parámetro.

De todo ello nació en 1977 el Vacheron Constantin 222, un curioso nombre que se debe a que en dicho año se cumplía el 222 aniversario de esta firma. Así como el Royal Oak y el Nautilus originales son plenamente identificables con sus versiones actuales, pocas personas relacionarían el 222 con el actual Overseas. El motivo es que el diseño del «deportivo elegante» de Vacheron Constantin ha sufrido varias revoluciones, que no evoluciones, hasta llegar al actual Overseas. Entre ellas encontramos el también famoso Phidias, pero esto ya pertenece a historias que exceden el motivo de este artículo. Vamos a centrarnos en el Historiques 222.

Historiques 222 – la caja

Al igual que en los anteriores relojes de la colección Historiques, Vacheron Constantin ha querido replicar el modelo original con la máxima fidelidad posible. No obstante, estos relojes no se han diseñado para permanecer en una vitrina o una caja fuerte, sino para poder ser utilizados a diario. Por ello, Vacheron ha introducido algunas modificaciones con respecto al original de 1977 con el fin de optimizar sus prestaciones.

El diámetro de la caja es de 37 milímetros, un tamaño calificado de Jumbo en su época ya que excedía lo habitual en los relojes de esta firma. Hoy en día puede parecer muy reducido para un reloj con esta filosofía, pero era lógico ser fiel al original en este parámetro ta importante. El grosor del Historiques 222 es de 7,95 mm, ligeramente superior a los 7 mm del 222 original, pero como veremos más adelante, esto se justifica por alguna de las modernizaciones que Vacheron ha decidido implantar en este reloj.

Lo que es mucho más discutible es que Vacheron ha decidido reeditar la versión de oro amarillo y no la de acero del 222. Como ya he apuntado anteriormente, el utilizar el acero supuso la mayor de las revoluciones que aportaban estos relojes en la década de los 70 ya que históricamente las grandes marcas consideraban que todos sus relojes debían estar realizados con metales nobles.

El diseño de Hysek en el 222 se aparta de las geometrías poligonales de Genta en el Royal Oak y el Nautilus. En su lugar tenemos un bisel perfectamente redondo, cuyo signo distintivo se concentra en la parte externa de su bisel, donde presenta un diseño «almenado».

Donde sí el 222 cumple al 100% con el concepto de reloj polivalente de lujo de los años 70 es en la utilización de un brazalete metálico para sujetarlo a la muñeca y en la absoluta integración de este elemento con la caja. Así, como ocurre con los relojes de este tipo con un diseño bien resuelto, es fácil intuir donde acaba la caja y empieza el brazalete, pero es casi imposible de distinguirlo visualmente.

El acabado de la caja y del brazalete es totalmente satinado en todos los elementos que los componen. Ello es idéntico a los acabados del 222 original y típico de los relojes de oro de la época, algo prácticamente en desuso hoy en día en este tipo de metal. Otro detalle que Vacheron ha mantenido en el Historiques 222 con respecto al original es la Cruz de Malta, realizada en oro blanco y aplicada sobre un extremo de la caja, a la altura de las 5 horas.

Cuando le damos la vuelta al Historiques 222 es cuando aparece la principal diferencia con el 222 de los setenta. Se trata de su fondo visto a través de cristal de zafiro. Ello nos permite contemplar y admirar el movimiento que encierra la caja, pero se aparta totalmente del 222 original ya que su fondo era opaco y ciego, totalmente realizado en el mismo metal que el resto de elementos de la caja y sobre el quje se grababa el símbolo 222.

Además de deferir conceptualmente con el 222 original, los elementos adicionales que requieren este fondo visto son los causantes parciales del incremento de grosor del reloj con respecto al original.

El diseño del brazalete puede considerarse idéntico al del 222 de los años 70, salvo porque se le han aplicado dos mejoras; un cierre desplegable triple en lugar del doble original y una optimización de las articulaciones de los eslabones. Ambas modificaciones benefician la ergonomía y resultan invisibles externamente, por lo que las considero plenamente acertadas.

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En este Watches and Wonders, Vacheron Constantin ha invertido los porcentajes y la mayor parte de las novedades que nos ha desvelado son piezas únicas, ediciones limitadas y muy altas complicaciones.De todos modos, tanto por volumen como por nivel de novedad, las versiones esqueleto de la colección Overseas acaparan el protagonismo.

Les Cabinotiers

Con el largo y descriptivo nombre de Minute Repeater Tourbillon Split-Seconds Monopusher Chronograph, Vacheron Constantin desvela el reloj más superlativo de las novedades que nos ha presentado en Watches and Wonders 2022. Su origen es el departamento «Les Cabinotiers», el taller mas exclusivo de Vacheron, cuya misión es analizar la demanda de relajos personalizados y ultracomplicados que realiza la élite de sus clientes.

En caso de aceptar la propuesta del cliente, se coordina con él los detalles y los relojeros y artesanos del taller se ponen manos a la obra para hacer realidad el sueño. Traducido; jamás veréis ni mucho menos tocaréis ninguno de estos relojes. Son relojes asombrosos desde todos los puntos de vista, pero carecen del atractivo aspiracional. Por mucho dinero que tengamos jamás los podremos adquirir ya que no son comerciales. Se ha realizado una sola unidad y jamás se repetirá.

No obstante, no deja de ser admirable la capacidad de Vacheron para crear estas maravillas mecánicas y un ejemplo evidente de ello es el reloj que nos ocupa. Se trata de una pieza cuya caja de oro rosa, de 45 mm de diámetro, encierra las complicaciones de Repetición de Minutos, Tourbillon y Cronógrafo Rattrapante Monopulsante. Dicho de otro modo agrupa las tres complicaciones que son el nirvana de cualquier entendido y coleccionista a la relojería del máximo nivel. Un aspecto que merece ser recalcado ers que esta caja solo mide 10,4 milímetros de grosor, toda una proeza teniendo en cuenta todo lo que alberga en su interior.

Además, por motivos técnicos que excederían el objetivo de este artículo, estas tres complicaciones son complejas de implementar conjuntamente y por ello solo en casos excepcionales las veremos en un solo reloj. Obviamente, todo esto ha requerido la creación de un nuevo mecanismo por parte de Vacheron Constantin. Se trata del calibre 2757, un movimiento de carga manual formado por 700 componentes. La frecuencia de oscilación de su volante es de 18.000 alternancias por hora y ofrece una reserva de marcha aproximada de 60 horas.

Como ya hemos comentado, el Minute Repeater Tourbillon Split-Seconds Monopusher Chronograph de Vacheron Constantin es una pieza única realizada por encargo. En consecuencia su precio es confidencial.

Overseas

Con la colección Overseas entramos en los relojes que sí se podrán adquirir pero no abandonamos la gama muy alta de Vacheron. Las dos novedades que nos presenta la manufactura ginebrina se caracterizan por ofrecer una estructura de esqueleto asociada a otra gran complicación.

La primera de las novedades de esta colección, el Overseas Tourbillon Squelette se sitúa en lo más alto de las complicaciones ofreciendo lo que ya describe su nombre; un regulador tourbillon asociado a un movimiento esqueleto.

La jaula del tourbillon, de gran tamaño y protagonista en la esfera, se ubica a la altura de las 6 horas. En el perímetro encontramos el índice de los minutos, con marcas muy definidas y con números árabes cada cinco unidades. Inmediatamente por debajo, encontramos un segundo anillo cuya función real es la de soportar los índices horarios, de tamaño muy generoso. La consecuencia de este esquema es una excelente legibilidad, aun. más meritoria al tratarse de un reloj esqueleto.

El mecanismo que equipa el Overseas Tourbillon Squelette es el calibre 2160 SQ, un movimiento de carga manual con un volante tourbillon que oscila a una frecuencia de 18.000 alternancias por hora y ofrece una más que notable reserva de marcha de 80 horas.

Vacheron nos ofrece este reloj en dos variantes de material de caja; oro rosa y titanio. El diámetro en ambos casos es de 42,5 milímetros de diámetro y 10,39 de grosor. Las dos versiones equipan un brazalete elaborado con el mismo metal que la caja. Se entregan con dos correas adicionales; de piel de becerro y de caucho.

La segunda novedad de la colección Overseas sigue asociando la estructura esqueleto con una gran complicación, en este caso el Calendario Perpetuo. El planteamiento de las indicaciones en la esfera sigue el mismo patrón de los dos anillos perimetrales que acabamos de ver en el tourbillon. La gran diferencia es que además de los índices del tiempo, en la esfera encontramos los tres diales que nos muestran las indicaciones del calendario, mas un cuarto en el que se aloja la fase lunar.

El responsable de esta complejidad es el calibre 1120 QPSQ/1, un movimiento de carga automática cuyo volante oscila a la atípica frecuencia de 19.800 alternancias por hora. La caja que lo protege mide 41,5 mm de diámetro por tan solo 8,1 de grosor y está realizada en oro rosa. Este Overseas equipa un brazalete de oro rosa y se entrega con dos correas adicionales; de piel de becerro y de caucho.

Historiques 222

Como ya deja claro su nombre, la colección Historiques se basa en la premisa de reproducir los iconos históricos de esta legendaria manufactura suiza. Ahora le ha llegado el turno al 222, el que puede considerarse como el antecesor del actual Overseas. El 222, diseñado por Jorg Hysek, fue lanzado en 1977 con motivo del 222 aniversario de Vacheron Constantin y a ello debe su denominación.

Como siempre ocurre con los relojes de esta colección, la fidelidad con respecto al original es un precepto básico y así se cumple en el 222. El diseño, la geometría de la caja, su integración con el brazalete, el bisel y la esfera son prácticamente idénticos al modelo de 1977. También lo son los 37 milímetros de diámetro de su caja, apodada en su día «Jumbo» por este tamaño, muy superior a los relojes de la época.

Visto externamente, este Historiques 222 es prácticamente indistinguible del original de 1977. La gran diferencia la encontramos en su mecanismo, ya que equipa un moderno calibre 2455/2, un movimiento de carga automática cuyo volante oscila a una frecuencia de 28.800 alternancias por hora.

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Este Bacchus es la última creación del departamento «Les Cabinotiers» de Vacheron Constantin cuya operativa es realizar relojes excepcionales bajo petición y con los requerimientos de clientes muy especiales. De ello ya os hemos hablado en diversas ocasiones ya que la manufactura ginebrina tiene la costumbre de presentarnos estas obras extremas que no tendremos oportunidad alguna de ver al natural.

Todas las piezas únicas salidas de este departamento de Vacheron Constantin tienen en común una enorme complejidad mecánica, pero el Grande Complication Bacchus va un paso más allá, combinando la extrema complejidad de sus 16 complicaciones con un también extremo trabajo ornamental en su caja.

Para la realizar la sofisticada decoración de la caja del Les Cabinotiers Grande Complication Bacchus, Vacheron combina las técnicas ornamentales del grabado manual y del engastado. El motivo que reproduce la decoración es una viña, con sus plantas y sus racimos de una. La razón de ello es obvia si atendemos al apodo de «Bacchus» del nombre de este reloj, el dios romano del vino, la fiesta y la juerga en general. Con ello también queda clara otra de las aficiones del afortunado cliente que ha encargado este reloj.

La reproducción de las hojas y las parras se realiza mediante la técnica del grabado manual sobre el oro rosa de su caja. En cuanto a las uvas, para recrearlas los artesanos de Vacheron recurren a un engaste de 113 rubíes que totalizan aproximadamente 1,84 quilates.

Las dimensiones de la caja son más que considerables, de 47 milímetros de diámetro y 19,10 de grosor, algo en cierto modo comprensible si tenemos en cuenta el complejo mecanismo que alberga su interior. No obstante, lo que sería un problema en un reloj convencional no lo es en este ya que dudo que sea ceñido jamás a la muñeca de su propietario. Lo más normal es que su destino sea una vitrina blindada o una caja fuerte.

Como es habitual e imperativo en este tipo de reloj, las indicaciones y complicaciones se reparten en sus dos caras, lo que requiere dos esferas. Es importante señalar que las dos complicaciones más emblemáticas, la de tourbillon y la de repetición de minutos no implican ninguna indicación. A pesar de ello Vacheron Constantin las hace constar en la esfera del anverso. La probable justificación es que el tourbillon es visible por este lado del reloj y la indicación de carga de la repetición de minutos también se ubica en esta cara. Estas son las indicaciones/complicaciones del anverso:

• Horas, minutos y segundos
• Repetición de minutos
• Tourbillon
• Calendario perpetuo (fecha, día de la semana, mes, año bisiesto)
• Ecuación del Tiempo
• Hora de salida del sol
• Hora de puesta del sol
• Indicación de reserva de marcha
• Indicación de reserva de carga de la sonería

En cuanto a la esfera del reverso del Les Cabinotiers Grande Complication Bacchus, algo menos saturado, encontramos las siguientes:

• Carta celeste
• Edad y fases de la luna
• Horas y minutos sidéreos
• Estaciones, signos zodiacales

El responsable mecánico de esta obra de arte de pulsera es el calibre 2755 CC16. Se trata de un movimiento de carga manual que mide 33,90 mm de diámetro por 12,5 mm de grosor y esta compuesto por 839 piezas. Su volante oscila a una frecuencia de 18.000 alternancias por hora y ofrece 58 horas de reserva de marcha, una cifra notable si tenemos en cuenta la energía que requieren todas sus complicaciones.

Como todos los relojes creador por el departamento «Les Cabinotiers», este Bacchus es una pieza única realizada por encargo. El proceso consiste e que el cliente propone lo que desea del reloj, Vacheron estudias su viabilidad y en caso positivo le comunica el precio. Si el cliente acepta, el departamento se pone en marcha y pasarán muchos meses antes de entregar el reloj. Por tanto, nos tendremos que conformar con ver estos relojes a través de las imágenes que nos proporciona la firma ginebrina. Aunque quizás algún día aparezca en alguna subasta de élite…

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Al ver la primera imagen del Traditionnelle Complete Calendar Openface, me ha venido de inmediato a la mente la vanguardista colección Quai de l’Ile que Vacheron presentó en el 2008. Lamentablemente, esta colección desapareció del catálogo sin explicación alguna. Se trataba de un diseño y un concepto muy innovador, especialmente tratándose de una marca que todo el mundo asocia con relojes de concepto clásico. Probablemente fue una idea demasiado atrevida para la época.

Aparte de otras innovaciones, el Quai de l’Ile, concretamente su versión Calendar, se reconocía de inmediato por los dos discos visibles que mostraban las indicaciones de dicha compilación. De hecho no se trata de nada especialmente complicado desde el punto de vista mecánico ya que son los mismos discos que nos muestran las indicaciones de forma convencional a través de una ventana. La diferencia es que al prescindir de una superficie opaca en la esfera, dichos discos quedan a la vista. Aunque se trata de un reloj completamente diferente, esta característica también la encontramos en el más reciente Traditionnelle Twin Beat del 2019 (artículo).

Este es exactamente el mismo concepto que aporta el Traditionnelle Complete Calendar Openface con respecto a la versión convenciónal de dicho reloj. La base de la esfera desaparece por lo que el anverso del movimiento se demuestra en su totalidad. En este anverso los grandes protagonistas son los dos discos que nos indican el día de la semana y el mes, cuya particularidad es que están realizados en cristal de zafiro transparente.

Debajo de cada disco, en una ubicación determinada, se sitúa un pequeño prisma rectangular con la cara superior blanca. La finalidad es producir un gran contraste con el negro de las letras de los discos y así proporcionar una fácil lectura de estas indicaciones cuando se sitúan encima. Por su parte, la fecha se desmarca totalmente de este método y se indica mediante una aguja central que recorre un índice perimetral

Con una salvedad, el movimiento que equipa este Traditionnelle Complete Calendar Openface es exactamente el mismo que ya conocíamos del Complete Calendar «convencional». Se trata del calibre 2460 QCL/2 y la salvedad es el 2 que vemos después de la barra, que en calibre del modelo «no openface» es un 1. Ello se refiere sin duda a los dos prismas que hemos mencionado, los cuales son innecesarios en la versión con base de esfera opaca.

Se trata de un movimiento de carga automática, cuyo volante oscila a una frecuencia de 28.800 alternancias por hora y ofrece una reserva de marcha de 40 horas. Otra característica especial de esta «versión 2» es que sus puentes y su platina están acabados con un tratamiento NAC de tonalidad antracita.

Tanto el diseño como el diámetro de la caja, de 41 milímetros, son idénticos al modelo del 2018. El grosor, de 11,05 mm, es tan solo 33 centésimas de milímetro superior al Traditionnelle Complete Calendar convencional, una diferencia totalmente irrelevante a efectos prácticos.

Vacheron Constantin nos ofrece dos versiones de este Traditionnelle Complete Calendar Openface; con caja de oro blanco y con caja de oro rosa. El precio es idéntico para ambas versiones; 47.200 EUR.

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Los Vacheron Constantin Overseas Everest son la más reciente adición a esta icónica colección de la legendaria manufactura ginebrina. A semejanza de los Nautilus o los Royal Oak, la base genética sobre la que se crearon los Overseas era su versatilidad, tanto técnica como estética. Se trataba de ofrecer un reloj que fuera razonablemente adecuado en prácticamente cualquier circunstancia.

Este principio siempre se ha mantenido inalterado, aunque pequeños detalles de diseño bastan para decantar, aunque sea ligeramente, la balanza hacia un lado un otro. Este es el caso del Vacheron Constantin Overseas Everest, que enfatiza la imagen deportiva del Overseas. En bastantes aspectos es una estética bastante similar a la que Vacheron Constantin ya realizó con el Overseas Dula Time dedicado al último proyecto de Cory Richards en el Everest.

Presentada en el salón SIHH del año 2016, la remodelación de esta emblemática colección de Vacheron Constantin constituyó su gran apuesta para la última década. A ello dedicamos este artículo en el que podréis ver que es presentaron cuatro variantes; el solo hora, el cronógrafo y dos ultra-thin: un también solo hora y un calendario perpetuo. Las versiones ultra-thin han desaparecido del catálogo, pero se han ido incorporando a él nuevas versiones, tanto de colores de esfera como de complicaciones, como son el Horas Mundiales o el Tourbillon.

Si comparamos la edición «Cory Richards» con esta nueva «Everest», apreciaremos que la imagen que transmiten es muy parecida. No obstante hay significativos referidos a los materiales empleados que las diferencian. La versión presentada en el 2019 se salía de lo convencional por el tantalio empleado para elaborar la base del bisel. Estas nuevas versiones «Everest» prescinden de este elitista metal y emplean el titanio en la carr

Si atendemos a las imágenes vemos que la carrura y el bisel parecen realizados en distintos materiales. La realidad no es así, ya que está gran diferencia estética se debe al acabado que se aplica a ambos elementos; pulido en la carbura y arenado en el bisel.

La esfera de estas dos nuevas referencias emula la del «Cory Richards» del 2019 ya que copia sus acabados y colores; terminación arenada y tono azul oscuro para el fondo de la empresa, que contrasta con. el naranja de las agujas ajenas a las horas y minutos. En el caso del cronógrafo son las que indican las correspondientes a esta función y en las del Dual Time las del segundo huso horario.

Las dimensiones del Dual Time son de 41 milímetros de diámetro por 12,8 mm de grosor. En su interior alberga el calibre 5110 DT/2, un movimiento de carga automática que oscila a 28.800 alternancias por hora y ofrece una reserva de marcha de 60 horas.

Por su parte, el Overseas Chronograph Everest incrementar ligeramente su tamaño hasta los 42,5 milímetros de diámetro y los 13,7 mm de grosor. El mecanismo que emplea es el calibre 5200/2, un movimiento de cronógrafo de carga automática que oscila a 28.800 alternancias por hora y que ofrece una autonomía de 54 horas de marcha.

La producción de cada uno de estos dos Overseas «Everest» está limitada a 150 unidades. El precio de la versión cronógrafo es de 36.900 EUR. El precio del Dual Time es de 31.200 EUR.

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Les Cabinotiers Westminster Sonnerie – Tribute to Johannes Vermeer – la caja

Por si no hubiera quedado claro por las imágenes, también hay que señalar que se trata de un reloj de bolsillo de imponentes dimensiones, de nada menos que 98 milímetros de diámetro por 32,60 mm de grosor. Con un guiño a los orígenes de este tipo de relojes de bolsillo, Vacheron decide emplear para elaborarla el oro amarillo.

En una caja de un reloj de este nivel solo cabe una posibilidad de decoración; el grabado y es lo que aplican los artesanos de Vacheron de una forma totalmente profusa. La menor dureza del oro con respecto a otros metales más mundanos, como es el acero o el titanio, facilita este tipo decoración, lo cual no implica, ni mucho menos, que sea una tarea sencilla.

El grabado, evidentemente realizado de forma manual, se aplica a la práctica totalidad del metal de la caja, ya sea la carrura o el bisel. Al igual que con el resto de elementos que componen el reloj, los detalles del grabado han sido discutidos y consensuados con su futura propietaria.

Finalmente el tema ornamental elegido está compuesto por hojas de acanto que recorren volutas y flores con un corazón de «perlas», lo que hace referencia directa al título de la obra pictórica que decora la tapa del reloj; La joven de la perla.

En conjunto, un grabado manual de este nivel comporta muchos más factores y tareas a dominar de lo que pueda parecer a simple vista cuando vemos una imagen de la grabadora con su buril. Por citar solo algunas se pueden mencionar los volúmenes, la profundidad del ahuecado, el pulido de algunas de sus partes o le cincelado del fondo, todo ello para obtener el motivo y el efecto deseado de forma perfecta.

Les Cabinotiers Westminster Sonnerie – Tribute to Johannes Vermeer – la tapa

Que todos los elementos que conforman este Les Cabinotiers Westminster Sonnerie son excepcionales es evidente, pero si tuviera que destacar uno, este sería sin duda la pintura en miniatura que decora su tapa. Se trata de una reproducción del celebre cuadro «La joven de la perla«, realizada en 1665 por el pintor holandés Johannes Vermeer.

Si antes de iniciar el proceso de planificar esta obra de arte de bolsillo, se hubiera realizado una encuesta entre los «connaisseurs» sobre quien debía realizar la enormemente compleja tarea de reproducir en miniatura y con esmalte este cuadro, el resultado hubiera sido sin duda unánime; Anita Porchet.

Sobre Anita Porchet hemos hablado en multitud de artículos y se trata sin duda de la «galáctica» de la pintura en miniatura sobre esmalte. Anita trabaja de forma independiente y por tanto ha realizado encargos para diversas firmas relojeras. Su importancia es tal que hace unos años se generó una gran inquietud en el sector porque la desoladora perspectiva era que cuando Porchet se retirase desaparecería esta técnica artística. Afortunadamente, Anita decidió crear una especie de mini-escuela en su taller y ahora son varios los precoces artistas que garantizan la continuidad de la pintura en miniatura sobre esmalte.

Las imágenes hablan por si mismas sobre la extrema dificultad de esta técnica artística. Lo primero que impresiona es que el microscopio se convierte en una herramienta casi imprescindible para llevarla a cabo. La segunda, que es la que más me impacto la primera vez que lo vi en directo, es la micro-paleta que se utiliza para depositar las distintas pinturas, que en ocasiones es una de las uñas de la artista.

Para resumir todo el trabajo de Porchet, basta mencionar que para realizar en miniatura la obra de Johannes Vermeer han hecho falta nada menos que siete meses, pero eso no es todo. La fase inicial de investigar los pigmentos y esmaltes apropiados para plasmar la obra se iniciaron en el 2018 y el proceso no terminó hasta el 2020. A todo ello hay que sumar las veinte fases de cocción del esmalte en el horno, necesarias para estabilizar los distintos colores empleados.

Las imágenes ya denotan que el resultado del trabajo de Anita Porchet merece calificarse con el mismo adjetivo que ya he empleado muchas veces en este artículo; excepcional.

Les Cabinotiers Westminster Sonnerie – Tribute to Johannes Vermeer – la esfera

En cualquier otro reloj, la esfera del Tribute to Johannes Vermeer sería la gran protagonista, pero ante al apabullante conjunto de cualidades de este reloj de bolsillo, parece que pasa injustamente desapercibida.

Dejando de lado las complicaciones sonoras, que no requieren ninguna indicación visual, este Les Cabinotiers Westminster Sonnerie nos ofrece algo tan puro, simple e imprescindible como son las indicaciones de horas y minutos mediante agujas centrales, complementadas por un pequeño segundero ubicado a la altura de las 6 horas.

El modo de implementar estas indicaciones solo puede calificarse como de exquisito. El fondo está elaborado con esmalte Grand Feu de tono «cáscara de huevo». Sobre él también se recurre al esmalte, esta vez azul, para plasmar los índices, tanto de horas como de minutos y segundos. Para las tres agujas se utiliza el mismo oro amarillo que ennoblece la caja. Todo simple, al mismo tiempo sumamente elaborado y con un resultado que nadie se atreverían a criticar.

Les Cabinotiers Westminster Sonnerie – Tribute to Johannes Vermeer – el movimiento

Para motoriza el Les Cabinotiers Westminster Sonnerie – Tribute to Johannes Vermeer, Vacheron Constantin recurre a un movimiento de nueva creación; el Calibre 3761. Este impresionante mecanismo está compuesto de 806 piezas y aporta las complicaciones de tourbillon, gran sonería, pequeña sonería, y repetición de minutos.

La dimensiones del calibre 3761, de 71 mm (31 1⁄2 lineas) de diámetro y 17,05 mm de grosor, son tan imponentes como las de la caja que lo protege. Si lo comparamos con los movimientos que habitualmente equipan los relojes de pulsera, podemos decir que sus dimensiones casi triplican la media.

En la imagen superior podemos observar el anverso del calibre, algo que siempre quedará oculto por la esfera y que por tanto ni su propietario ni nadie podrá ver jamás, salvo si algún día se efectúan tareas de mantenimiento y se desmonta el reloj. En esta cara se observa un auténtico enjambre de ruedas y palancas, lo que deja pocas dudas sobre la enorme complejidad mecánica del calibre 3761.

Una particularidad, casi curiosidad en este anverso del calibre 3761 es el único puente que en él se aprecia, ubicado en la parte superior derecha, donde se aplica una grabado que reza: «Faire mieux si possible, ce qui est toujours possible» Este grabado y esta frase de François Constantin refleja el espíritu de la verdadera Alta Relojería ginebrina, que dicta que en todos los elementos del reloj deben realizarse acabados de la máxima calidad, aunque sea el anverso del movimiento, que casi nunca será visible.Todo esto es magnífico pero personalmente me parece excesivo grabar una gran frase en un emplazamiento que nunca permitirá que sea leída por nadie.

El reverso del calibre 3761, que sí podremos admirar al abrir la tapa del reloj, deja visible los principales elementos de sus grandes complicaciones. El tourbillon y los martillos de la sonería se ubican en la mitad inferior del movimiento, mientras que los barriletes que suministran la energía al reloj se ubican en la parte superior. Como no puede ser de otro modo, los acabados son excelentes y entre ellos destaca la sofisticada decoración grabada del puente del volante.

En la imagen del reverso, en el perímetro de la parte inferior e inferior derecha, podemos apreciar los cinco martillos que percutirán cinco timbres para hacer honor a su cualidad de carillón Westminster, que debe su nombre a las campanas del Big Ben londinense. Mediante este complejo sistema se pueden generar cuatro notas de distintos tonos o frecuencias de sonido.

Lo que no se observa en el calibre son los timbres, por lo que se deduce que están montados en la cara interna de la caja. Esta es una solución muy empleada en los últimos años en relojes con sonería y en teoría mejora tanto la potencia como la pureza del sonido que generan los martillos al golpearlos.

Ajustado en el modo Grande Sonnerie, el reloj hace sonar los cuartos al paso, mediante compases «Westminster», seguidos del número de notas simples correspondientes a la hora. En el modo Petite Sonnerie, hace sonar los cuartos al paso pero sin repetir las horas, que solo suenan al cambiar. Finalmente, la Repetición de Minutos, según el comunicado de prensa de Vacheron Constantin, hace sonar los cuartos, los minutos y las horas, una secuencia atípica ya que normalmente suenan primero las horas. Un selector ubicado en la carrura a la altura de las 9 nos permite elegir entre los tres modos posibles de sonería.

Como es habitual en la mayoría de relojes con sonería, el calibre 3761 equipa dos barriletes, uno de ellos específico para suministrar energía a las funciones de sonreía, ofrece una autonomía de 16 horas en modo Gran Sonería. El barrilete principal que dota de energía a las indicaciones del tiempo, aumenta su reserva de marcha hasta las 80 horas. La frecuencia de oscilación del volante del tourbillon es de 18.000 alternancias por hora

Al contrario de lo que efectuamos en un Test convencional, omitiré la valoración final ya que su finalidad desaparece al ser un reloj que, por su condición de pieza única, nadie podrá adquirir. Solo repetir que, como ya he escrito al inicio de este artículo, es evidente que el Vacheron Constantin Les Cabinotiers Westminster Sonnerie – Tribute to Johannes Vermeer es una pieza excepcional en todos los ámbitos. Ahora son queda felicitar a su afortunada propietaria.

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El Vacheron Constantin Traditionnelle China Limited Edition es un reloj destinado al público femenino y el motivo de su creación es el Qixi, que es el equivalente al día de San Valentin occidental. La base elegida para esta edición especial es la colección Traditionnelle, concretamente la versión mecánica de carga manual en su tamaño más reducido, de 33 milímetros de diámetro. El material elegido para elaborar la caja es el oro rosa 5N y su bisel está adornado con un engaste de 54 diamantes talla brillante.

La diferenciación de este Traditionnelle con respecto a las dos variantes de este reloj existentes en el catálogo actual de Vacheron Constantin la encontramos en su esfera, concretamente en el nácar opalino con destellos de color púrpura que se ha utilizado en su base.

En el color púrpura, que Vacheron también emplea en la piel de la correa del Traditionnelle China Limited Edition, es donde encontramos la relación con China y con su «Festival Qixi». Este día se inspira en un cuento romántico chino que tiene como protagonistas a Zhinü y Niulang, una tejedora y un pastor. Los dos amantes están condenados a vivir en mundos distintos y una vez al año una bandada de urracas crea un puente entre ambos mundos para que se puedan encontrar.

Cuando este fenómeno ocurre, las hortensias se encuentran en plena floración  y ofrecen variados tonos de color púrpura. Por ello, este día también es conocido en China como el «El día púrpura de San Valentín». Además de la relación del color purpura con este día y con el romanticismo, también es el último color del arco iris y se considera sinónimo de nobleza y elegancia en la cultura china.

El Vacheron Constantin Traditionnelle China Limited Edition equipa el calibre 1400, un movimiento de carga manual manufacturado por Vacheron Constantin, diseñado para servir de base a muchos de sus relojes mecánicos. Su frecuencia de oscilación es de 28.800 alternancias por hora y ofrece una reserva de marcha de 40 horas.

El grosor de este calibre es de tan solo 2,6 milímetros, lo que le permite equipar relojes en los que la delgadez es una cualidad irrenunciable, algo inherente a todas las firmas auténticas de Alta Relojería. Este es evidentemente el caso de este Traditionnelle China Limited Edition, cuyo grosor es de tan solo 7,7 mm.

Como resumen, el Vacheron Constantin Traditionnelle China Limited Edition es un reloj que aporta el siempre especial atractivo de un esfera realizada en nácar y en el que sus tonalidades púrpura, además del simbolismo, añaden un toque de espectacularidad. De todos modos, la elegancia inherente a este reloj no se ve disminuida en absoluto y como se aprecia en las imágenes, salvo las deportivas, es plenamente adecuado en la mayoría de circunstancias que rodean a diario a la mujer moderna.

Como ya hemos comentado, el Vacheron Constantin Traditionnelle China Limited Edition se emite en formato de edición limitada, a 100 unidades. Inicialmente se ha reservado para la plataforma virtual China Tmall y ahora ya está disponible en las boutiques Vacheron Constantin del resto del mundo.

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