El Reine de Naples 8938 es la última adición de Breguet a su emblemática y exclusiva colección de relojes femeninos. Enumerar las versiones del Reine de Naples que hemos visto aparecer desde su lanzamiento en el año 2002 sería una tarea ingente, digna de una monografía sobre este legendario reloj. Ello nos puede llevar a pensar que es imposible crear nuevas versiones de esta pieza, pero el nivel creativo del sector relojero suizo y aun más de Breguet no conoce límites. Vamos a ver qué ofrece este 8939.
Obviamente, la caja de este Breguet Reine de Naples 8938 conserva el inconfundible diseño de esta colección y sus dimensiones son de 36,5 x 28,45 milímetros. Breguet nos ofrece dos versiones de este Reine de Naples: con caja de oro blanco y con caja de oro rosa. La primera equipa una correa de piel de aligator azul y la segunda se decanta por el color naranja.
Tanto el bisel como el realce interno, están decorados con un engaste de 161 diamantes talla brillante que suman un total de aproximadamente 1,82 quilates. En la corona encontramos un diamante talla briolette, que se suele traducir como talla pera. Se trata de un tipo de talla de las más antiguas que se conocen, pero poco común hoy en día por la gran cantidad de material que se desperdicia del diamante en bruto.
La sofisticación de estos engastes es evidente pero el factor diferencial del Reine de Naples 8938 lo encontramos en su esfera y en el espectacular engastado tipo nieve que la decora. El nombre de este tipo de engaste no puede ser más apropiado ya que, a semejanza de la infinita capa de cristales de agua que forma un manto de nieve, aquí son los cristales de carbono, los diamantes, los que forman una deslumbrante capa.
Al contrario que los engastes más tradicionales, el «nieve» recurre a piedras de muy distintos tamaños y el objetivo es que quede cubierta la práctica totalidad de la superficie sobre la que se aplica. El artista engastador actúa como si estuviera delante de un puzzle, donde debe elegir cada diamante en función de su tamaño y del hueco que debe tapar.
En la parte inferior de la esfera es donde Breguet emplaza un anillo de considerables dimensiones, realizado en nácar, que es donde se emplazan los 12 índices horarios. Como no podía ser de otro modo, para estos índices se recurre a la típica tipografía que denominamos «números Breguet». Para indicar este índice, se recurre a otro de los grandes signos estéticos de la legendaria firma relojera; las agujas Breguet.
Es importante señalar que son muy pocos los relojes de carácter extremadamente artístico, que al mismo tiempo son capaces de ofrecer una lectura clara y fácil del tiempo. Este Breguet Reine de Naples 8938 es uno de ellos.
El cristal de zafiro que encontramos en el fondo de la caja nos permite admirar el calibre 537/3, un movimiento mecánico de carga automática que utiliza el silicio para realizar la rueda de escape, el áncora y la espiral. En su masa oscilante encontramos la característica decoración Guilloché que Breguet nos ofrece con asiduidad. Su frecuencia de oscilación es de 3,5 Hz y su reserva de marcha de 45 horas.
Como siempre ocurre en estos casos, la elección entre las dos versiones que nos ofrece Breguet de este Reine de Naples 8938, es una cuestión totalmente subjetiva. También es cierto que el color que ofrece cada tipo de oro implica un carácter determinado. Resumiendo mucho, el oro blanco es la elección de las mujeres que privilegian la discreción. El oro rosa es la opción que enfatiza la espectacularidad.
El precio del Breguet Reine de Naples 8938 en versión de oro blanco es de 49.800 EUR. El precio de la versión de oro rosa es de 48.800 EUR.
