Con mayor o menor acierto, la industria relojera ofrece una gran cantidad de modelos que retoman el estilo vintage y cálido de los cristales de tipo glassbox o abovedado de los años 60 y 70. Pero pocos de ellos consiguen el encanto de la que personalmente son las mejores novedades de TAG Heuer en el Watches and Wonders 2023, retomando el diseño de cristal abovedado que se encuentra en los primeros modelos Carrera para lanzar una nueva línea. La colección «Glassbox» incluye dos versiones del TAG Heuer Carrera Chronograph de 39 mm y el TAG Heuer Carrera Chronograph Tourbillon de 42 mm, combinando un precioso diseño con nuevas y equilibradas proporciones y renovados mecanismos para celebrar el 60º aniversario de este icónico reloj.
Aunque las cajas de acero de la colección Glassbox se reconocen instantáneamente como genuinamente Carrera, estos nuevos modelos ofrecen uno de los cambios visuales más drásticos de los últimos años. El Carrera Chronograph 39 mm es evidentemente mucho más pequeño que el Carrera Chronograph Tourbillon 42 mm, pero ambos ofrecen un estilo similar. Como su nombre nos avanza, el cristal es el elemento central de este nuevo diseño: alto y muy abovedado, se extiende de borde a borde de la caja de manera que parece no haber ni bisel. No solo altera el tradicional estilo del Carrera, sino que agrega una inesperada ventaja adicional al permitir que la esfera se lea incluso desde ángulos casi imposibles.
TAG Heuer lo combina con una caja geométrica clásicamente Carrera, con características asas angulares biseladas, biselado pulido que se prolonga de la carrura a las asas, cepillado de la carrura y robustos pulsadores de tipo pistón. Con un cristal de zafiro en la trasera en ambos modelos, la hermeticidad del 39 mm y del tourbillon es de unos respetables 100 metros.
Cada referencia de la colección “Glassbox” marca su propio territorio a través del diseño de su esfera. La variante con esfera azul del TAG Heuer Carrera Chronograph de 39 mm, es la que ofrece la imagen más equilibrada y moderna. Al igual que varias iteraciones modernas de Carrera, prescinde de la típica textura de esfera con rayos de sol en favor de un cepillado radial de finamente granulado. Si, parece un cambio sutil, pero la realidad es que le confiere un acertado toque deportivo más contemporáneo.
Dado que el cristal es la pieza central, no es de extrañar que TAG Heuer haya rediseñado radicalmente el perímetro de la esfera y las escalas que implementa para interactuar mejor con la nueva filosofía de diseño «Glassbox». La parte interior del realce acoge la escala de segundos del cronógrafo claramente impresa y presenta una espectacular concavidad que se extiende 90 grados desde la superficie plana de la esfera hasta el borde superior vertical de la escala. Desde ahí, la parte exterior se inclina hacia abajo, curvándose para encontrarse con el cristal en el lateral de la caja. Este diseño orgánico y redondeado puede estar muy alejado visualmente de los Carrera históricos, pero incluso este segmento exterior está ligado al lenguaje visual del Carrera con la adición de una nítida escala taquimétrica.
El resto de la esfera resulta más reconocible, incluidas las manecillas de tipo espada, las subesferas del cronógrafo con azurage y el minimalista pequeño segundero a las 6 en punto junto la ventana de fecha, pero incluso estos elementos más tradicionales reciben pequeños ajustes para adaptarse mejor a este nuevo concepto.
Si el TAG Heuer Carrera Chronograph de 39 mm con esfera azul presenta una equilibrada mezcla entre pasado y futuro, el modelo de esfera negra representa un homenaje mucho más descarado a los Carreras anteriores. Si bien mantiene los conceptos básicos como los elementos de la esfera, la superficie de la esfera cepillada radialmente y el distintivo anillo perimetral, hay una serie de cambios que hacen que este modelo se acerque más a los diseños de Carrera de los años 60.
Lo más obvio es la combinación de colores «panda inverso», con las tres subesferas plateadas azurage en relieve que contrastan marcadamente con su entorno negro. También debemos tener en cuenta el tono caqui de la sustancia luminiscente, que le añade un toque de calidez vintage. Con todo ello, lo que subjetivamente más me ha sorprendido es la ubicación de la ventana de fecha a las 12 en punto.
La esfera más exclusiva de la colección «Glassbox» de TAG Heuer Carrera es el Chronograph Tourbillon de 42 mm. En lugar de la estética compactos y recargada de los modelos de 39 mm, TAG Heuer busca acentuar las dimensiones más amplias de esta pieza con un diseño más abierto y espacioso.
Sin una escala taquimétrica, la escala de los segundos se desplaza hacia el segmento exterior del anillo perimetral, lo que implica que la esfera dispone de mucho más espacio que los modelos de 39 mm. Sin embargo, este cambio crea una transición no muy bien resuelta y poco elegante entre la esfera azul con cepillado radial y el neutro anillo perimetral metalizado.
Del mismo modo, las subesferas tono sobre tono con anillos exteriores plateados cepillada en relieve conducen a una apariencia más limpia y visualmente más abierta, mientras que los detalles en naranja brillante en el segundero central del cronógrafo y la escala exterior agregan un contraste irresistiblemente atrevido y deportivo.
Por supuesto, como la mayoría de los relojes equipados con tourbillon, el Carrera Chronograph Tourbillon de 42 mm sirve para enmarcar visualmente este escape. Un trío de brazos esqueletados cepillados radialmente forman la jaula del tourbillon, mientras que un anillo exterior biselado y pulido ayuda a focalizar la atención hacia las 6. Hasta ahí, perfecto, pero debemos tener en cuenta la forma en que la ventana del tourbillon corta el realce perimetral a las 6. Personalmente, me parece un desatino.
Los dos Carrera Chronograph de 39 mm implementan el calibre TH20-00. TAG Heuer se refiere a él como una «versión evolucionada» de su anterior calibre cronógrafo insignia, el Heuer 02, y aunque la mayoría de las actualizaciones parecen tener como objetivo mejorar la eficiencia, cabe destacar que también mejora sus acabados. El Heuer 02 ha estado en producción durante menos de tres años, por lo que es bastante sorprendente ver una revisión significativa tan pronto, aunque algunas de sus nuevas características son bienvenidas, como por ejemplo su sistema bidireccional de remonte automático. Sigue disponiendo de embrague vertical y rueda de pilares, con una remarcable reserva de marcha de 80 horas y latiendo a 28.800 alternancias por hora. Visualmente, el TH20-00 simplifica el Heuer 02 mediante de puentes semiesqueletados más anchos y resistentes rematados con Côtes de Genève. Sin embargo, es en el rotor el elemento que recibe un cambio más radical, sustituyendo el rotor esqueletado del Heuer 02 inspirado en el volante de carreras de radios múltiples por un rotor recortado basado en el escudo de TAG Heuer, incluyendo una base mate con un centro elevado cepillado verticalmente para lograr mayor profundidad visual.
TAG Heuer implementa el calibre TH20-09 en el Carrera Chronograph Tourbillon de 42 mm. Así como el TH20-00 es un Heuer 02 actualizado, el TH20-09 evoluciones el Heuer 02T. A diferencia del TH20-00, el TH20-09 cuenta con la certificación cronométrica del COSC, disfrutando de la misma reserva de marcha de 80 horas y una frecuencia de 28.800 alternancias por hora.
TAG Heuer entrega los tres modelos de la colección Carrera “Glassbox” con clásicas correas desplegables de piel de becerro, en color negro y perforada para la versión con esfera negra y en color azul y lisa para las dos referencias con dial azul.
El nuevo TAG Heuer Carrera Chronograph 39 mm estará disponible a través de distribuidores autorizados a partir de abril de 2023 con un precio de 6.500 €, mientras que el TAG Heuer Carrera Chronograph Tourbillon 42 mm lo seguirá en mayo de 2023, y su precio será de 23.000 €.
